El gobierno provincial y comercios de distintos sectores ratificaron la continuidad por otros 60 días de Precios Acordados Chaco, el programa de congelamiento de valores de alimentos que forman parte de la Canasta Básica y que ayudan a resguardar el poder adquisitivo de las y los habitantes de la provincia.
«Es importante contar con el acompañamiento para sostener los convenios que nos permiten contener los precios más sensibles, protegiendo los bolsillos de los trabajadores en un momento difícil en el que buscamos ordenar la economía con una reactivación firme», aseguró ayer el ministro de Producción, Industria y Empleo, Sebastián Lifton.
Desde su arranque en marzo de este año, Precios Acordados Chaco contempla el congelamiento de 25 productos alimenticios en supermercados; cinco cortes cárnicos; pan a $99; y gas envasado.
El programa apunta a establecer valores de referencia para artículos esenciales y de consumo masivo garantizando además el abastecimiento en todo el territorio provincial.
En el caso de las bocas de venta en autoservicios y comercios de proximidad, el esquema fue prorrogado por otros 60 días, es decir que continuará hasta mediados de julio con los mismos valores finales al consumidor.
En lo que refiere a carnicerías, el convenio ha sido prolongado por un plazo de 30 días de extensión; mientras que lo que respecta al kilogramo de pan, la validez del acuerdo rige hasta el 30 de junio próximo.
«Es clave sostener estos instrumentos que no solamente congelan alimentos y artículos de primera necesidad sino que además fijan un precio de referencia», explicó Lifton.
Actualmente, los 25 productos a precios acordados en supermercados se consiguen en más de 73 comercios adheridos en distintas ciudades de la provincia, entre ellas Resistencia, Fontana, Barranqueras, Sáenz Peña, Quitilipi, Villa Ángela, General Pinedo, Charata, Las Breñas, General San Martín y Miraflores.
Mientras que el convenio con el Centro de Industriales Panaderos, que sostiene el valor del kilogramo de pan en $99, está vigente en más de 84 puntos de venta en la provincia, en Las Garcitas, Las Palmas, Margarita Belén, Pampa del Indio, San Bernardo y Villa Berthet, además de las otras once que también cuentan con el acuerdo con autoservicios.
En lo que respecta a los precios congelados en materia de productos cárnicos, el programa alcanza hasta el momento a 14 bocas de venta ubicadas en las zonas centro, sudoeste y metropolitana.
Ese esquema, puntualmente, se complementa con el que impulsa el gobierno nacional y que también cuentan con vigencia y presencia en comercios de la provincia con un total de once cortes a precios bajos.
Complemento con la Tarjeta Alimentar
La estrategia impulsada por la cartera industrial-productiva contempla también a la tarjeta Alimentar (que en la provincia cuenta con unos 70 mil beneficiarios y beneficiarias), la cual es aceptada como medio de pago en los puntos de venta.
«Al contar con la tarjeta como instrumento de pago en los comercios locales, lo que buscamos es direccionar esos recursos que se renuevan mes tras mes a la adquisición de los productos de precios acordados y así maximizar el poder adquisitivo de esas familias», agregó el ministro.
«Seguimos trabajando fuertemente para ampliar la base de los acuerdos vigentes, sumando a otros sectores y bocas de venta, garantizando abastecimiento y aumentando la cantidad de bocas de expendio con precios razonables que protegen el bolsillo de los trabajadores», insistió Lifton.