El Papa Francisco habló conectado en videoconferencia con El Impenetrable.
Junto al Papa Francisco, el gobernador Jorge Capitanich, asistió a un acontecimiento histórico, la inauguración del Centro para la Recuperación de Adicciones en el Paraje Cuatro Bocas, en El Impenetrable Chaqueño. Un trabajo en conjunto con Scholas Ocurrentes y la Universidad del Sentido para que casi 30 personas puedan acceder a una contención por problemas de consumos problemáticos. También recibirán formación técnica y profesional, desde carpintería hasta herrería, para el aprendizaje de oficios y contarán con infraestructura deportiva y atención primaria de la salud.
El papa Francisco afirmó en ese contexto que la raíz de la «desconfianza en la política» se da cuando «se confunde con una empresa», al tiempo que planteó que «la discusión es clave» y, en una crítica a sectores del episcopado estadounidense, mostró su rechazo a los sacerdotes que bendicen armas, al señalar que «los instrumentos de destrucción no deben ser bendecidos».
«La política es la forma más alta de la caridad. El amor es político, esto es social, para todos. Cuando falta esta universalidad del amor, la política cae, se enferma o se vuelve mala», planteó Francisco al visitar hoy la sede romana de la fundación pontificia Scholas Occurrentes, que dirigen a nivel mundial los argentinos José María del Corral y Enrique Palmeyro. «Cuando me hablan de cómo está la política en el mundo, yo digo: miren dónde están las guerras, y allí está la derrota de la política. Una política que no es capaz de dialogar para evitar una guerra está derrotada, está terminada, perdió la vocación de unidad, de armonía», criticó el pontífice.
En ese marco, al lanzar una escuela de formación política, apadrinada por Scholas y que será dirigida por el argentino Juan Maquieyra, el Papa destacó la necesidad de diálogo «incluso con opiniones diversas» ya que «la discusión es clave en la política». «Los parlamentos son claves, porque ahí se elaboran las cosas. Siempre teniendo en mente que la unidad es superior al conflicto», convocó Jorge Bergoglio.
El Papa opinó que «la política es un camino, es iniciar procesos, y no un punto de llegada. Hay que mirar donde terminará el proceso». «La desconfianza en la política viene cuando se confunde con una empresa. Se piensa ‘cuánto me da’. No, la política es caminar también si en el camino se quema el político, pero lo importante es llegar a la unidad, a la armonía», sostuvo.
En esa dirección, Francisco volvió a mostrar su rechazo a la venta de armas y aseveró que «el test sobre la honorabilidad de una nación para mi es si hacen armas para la guerra, si la riqueza la hace vendiendo armas para que otros se maten».
«Ahí veremos si una nación es moralmente sana. Me hace mal al corazón cuando veo que algunos sacerdotes bendicen armas. Los instrumentos de armas no deben ser bendecidos»; planteó luego, en una crítica implícita a sectores del episcopado estadounidense cercanos a sectores armamentistas.
Desde el edificio del barrio de Trastevere, el Papa se conectó también con jóvenes de todo el mundo, incluido un grupo de El Impenetrable, Chaco, donde Scholas trabaja en proyectos de la institución en el trabajo de prevención y recuperación de adicciones, acompañado.