Las medidas sanitarias que se renovaron una semana más al menos, si bien asoman en principio como «incómodas», reflejan en realidad la preocupación por bajar la nueva ola de contagios en el Chaco. Y la labor preventiva policial es fundamental para que, de alguna manera, la gente tome conciencia del peligro que acarrea el Covid.
Los procedimientos de control efectuados en todo el territorio chaqueño tuvieron, esta vez, un resultado más que positivo y altamente llamativo: muy pocas fiestas clandestinas se detectaron y solo se debieron labrar actas de infracción.
Hay dos conclusiones que pueden explicar este «fenómeno»: una, que los dispositivos preventivos constantes obligaron a los «rebeldes» a encerrarse. El otro motivo, que ojalá sea real, es que más gente fue tomando real conciencia del peligro de las aglomeraciones.
Como sea, todo hizo para que este fin de semana de cuarentena, el segundo tras la prórroga del decreto del Estado provincial, de seguir con la nueva «fase 1».
MERMA CONSIDERABLE
Fuentes policiales informaron a LA VOZ DEL CHACO que este fin de semana se registraron en el Chaco solo cinco eventos sociales no permitidos, los llamados clandestinos.
Tres de ellos fueron en el área metropolitana y 2 en el interior.
Pero sí hubo que labrar actas de infracción a aquellos que circularon por la vía pública sin contar con el pasaporte Covid o no llevar barbijos.
En la zona de la capital chaqueña y del Gran Resistencia, esto es Barranqueras, Fontana y Puerto Vilelas, se detectaron el sábado y madrugada de ayer 47 infractores, en tanto que en el resto de la provincia hubo 107 casos.
El viernes hubo un poco más: 13 sancionados en el área metropolitana, pero 26 en las localidades del interior.
Y un dato más: el viernes no hubo un solo caso de fiesta clandestina detectada.
Todo esto se debe al permanente patrullaje de los efectivos y el control en los principales accesos a las ciudades.
LOS DISPOSITIVOS
A partir del sábado, los empleados policiales afectados al operativo realizan emplazamientos de control vehicular y de personas en puestos fijos apostados en las principales avenidas del micro y macrocentro.
Otras patrullas efectúan recorridas y emplazamientos esporádicos cada quince minutos en avenidas y calles.
El servicio de policía caminante se desplegó en la zona comercial y alrededores de modo que cada 400 metros se encuentre un uniformado dispuesto a ayudar a la gente.
La división Canes custodia y regula la circulación en las plazas y espacios públicos de la capital.
En tanto la Policía Montada lo hace en el Parque de la Democracia, Parque Tiro Federal y el Aeropuerto Internacional. Esta modalidad se replicará en las localidades del interior provincial.
En caso de no contar con pasaporte Covid o no justifique su permanencia en la vía pública se labrará el acta de infracción y se secuestrarán los rodados.
Se pide a la comunidad su colaboración, no deben circular fuera de horarios permitidos y, en caso de hacerlo, contar con permisos de circulación y con barbijo colocado. Las actividades al aire libre y deportivas en grupo no están permitidas.