En la sesión del pasado miércoles, la Legislatura provincial sancionó la Ley de Educación Digital, remitida en marzo por el Poder Ejecutivo, que apunta a garantizar el acceso de estudiantes y docentes en todos los niveles a esta modalidad educativa. La ministra de Educación de la Provincia, Daniela Torrente, junto a su equipo, expresó la satisfacción por la aprobación de esta norma, ya que por un lado responde a un eje prioritario en materia de la política pública que lleva adelante la gestión del gobernador Jorge Capitanich, mientras que por el otro es el resultado de debates con establecimientos escolares y docentes en la Semana de la Educación Digital, realizada en octubre del año pasado, y cuenta con contribuciones de sindicatos docentes, de las universidades y otros miembros del Consejo Provincial para una Educación de Calidad con Equidad e Inclusión. «Esta ley institucionaliza todo el proceso y el trabajo que se lleva a cabo como un eje de gestión en materia educativa, en lo que llamamos el sistema de educación digital como un subsistema del sistema educativo, que lo viene a complementar, a formar y alfabetizar a nuestros estudiantes en saberes digitales», explicó la funcionaria. Mientras que, por su parte, Sergio Lapertosa, director de Ciencia y Tecnología en Ministerio de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología del Chaco, en declaraciones a Radio Facundo Quiroga, explicó: «Es una ley que no viene a reemplazar absolutamente nada de lo que ya está, sino que viene a profundizar, fortalecer, complementar a la educación. No es un nuevo sistema educativo, no viene a reemplazar la presencialidad, básicamente es poner blanco sobre y negro y obligar al Estado chaqueño a asumir compromisos en pos de mejorar el presente y construir un mejor futuro», aseguró. Al tiempo que destacó: «La ley primero y principal define a la educación digital como un bien público, y por lo tanto es un derecho para los ciudadanos del Chaco».
formación integral
Torrente precisó que esta ley «tiene la particularidad que contempla a la formación en los saberes de manera integral y asegura la provisión de todo el equipamiento y la infraestructura que se requiere para llevar a cabo desde las escuelas y de manera presencial este tipo de formación». Y aclaró que «la ley no busca que la educación digital sustituya a la educación presencial, sino que en el contexto de la educación presencial se institucionalicen tanto las prácticas como los contenidos relacionados con la formación en saberes digitales, y para que eso se pueda hacer se requiere conectividad en las escuelas, tener equipamiento para docentes y estudiantes; tener docentes formados y al mismo tiempo tener equipos dentro de las escuelas que puedan apoyar a los docentes en su formación y en el sostenimiento de toda la infraestructuras; todas esas cuestiones están contempladas dentro de la ley, como también la asignación específica de parte del Fondo Educativo para que eso se pueda financiar».
cómo nace
una ley
Lapertosa, por su parte, recordó que dentro de las políticas públicas que difinió Capitanich para su plan de gobierno «se fijó lo que se llama la agenda digital, dentro de ese contexto, cada ministerio tenía sus correspondientes metas y correlatos. Como Ministerio de Educación, en diciembre de 2019 cuando se arranca en la gestión, en nuestra agenda estaba la educación digital, para nosotros en ese momento consistía en la incorporación de saberes y prácticas docentes relacionados a las TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación), y al inicio de ese recorrido nos llega la pandemia, lo que nosotros concebíamos como herramientas digitales que complemente la presencialidad, que ayuden e incorporen saberes, se convirtió en la práctica cotidiana, y eso puso en evidencia la cantidad de falencia que teníamos no solamente en la provincia sino en todo el país», describió y justificó: «Esto se dio porque se discontinuaron las políticas públicas relacionadas a la educación digital, hablando precisamente del plan Conectar Igualdad. Durante muchos años no se entregaron más dispositivos a los docentes y estudiantes, hubo una desinversión en los planes de conectividad», indicó. Tras lo cual dimensionó: «Durante los cuatro años de la gestión nacional anterior solamente se financió la conectividad del 30% de los establecimientos escolares de la provincia Capitanich», precisó. «Entonces, pandemia de por medio, a todas nuestras ideas, empiezan a saltar todas las falencias que teníamos. Queríamos introducir la programación en las escuelas, la formación de Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemática para fomentar las formaciones científicas y tecnológicas, y los docentes nos decían que no tenían dispositivos, que no tenían conectividad, o formación y preparación para eso, o ayuda o asistencia», explicó.
Como respuesta a esta situación, el funcionario explicó: «Empezamos a fortalecer el trabajo junto con Ecom para aumentar la cantidad de escuelas conectadas, desplegamos un equipo territorial en 36 localidades de la provincia para que pongan en condiciones dispositivos viejos, que desbloquen los equipos. Recibimos una partida de equipos a nivel nacional que distribuimos en los sectores más vulnerables de la escuela secundaria, comenzamos a hacer todo ese trabajo», describió el funcionario.
Sin embargo, al ser solamente una decisión política, la misma podía correr riesgo en su continuidad: «Empezamos a ver también, que nosotros nos vamos a ir, pueden cambiar las políticas nacionales. Entonces tomamos una decisión y pensamos en una ley de educación digital, que siente las bases fuertes para que no haya cambios de gobierno ni de funcionarios que tiren por la borda el trabajo que se hizo anteriormente», indicó la génesis del proyecto.
debates y consultas
Para elaborar esta ley comenzaron un proceso de consulta con especialistas y los mismos actores y beneficiarios de la mismos: «Tuvimos contacto con los docentes, los estudiantes, con los directivos, supervisores, y los equipos técnicos del ministerio, para entender lo que pasaba, y empezamos a pensar en qué debería tener una ley, empezamos a mirar que había en otras localidades, que se impulsaba, y fue a medidos de octubre que hicimos lo que se llamó la Semana de la Educación Digital, convocamos expertos en la temática, discutimos, debatimos, planteamos diferentes cuestiones y luego cerramos con jornadas de debate institucional, con más de 2 mil establecimientos de la provincia que involucraban a más de 36 mil docentes», precisó. De esta forma el funcionario echó por tierra los cuestionamientos que generó esta normativa sobre la falta de consenso y consulta, como así también sobre la pretensión de generar un sistema educativo paralelo.
Por lo cual consideró que «parte de las críticas que recibe esta ley pueden ser en tono político porque están en campaña, la verdad que quisiera dar una respuesta como ciudadano. Nosotros creemos en las construcciones colectivas. Elaboramos un documento donde explicamos que creíamos que era la educación digital y hasta donde teníamos que ir, planteamos ejes de discusión, y planteamos preguntas cerradas para que se puedan elegir opciones, y preguntas abiertas donde los establecimientos se podían explayar. Se generaron un montón de respuestas que nosotros la analizamos, no hay una sola propuesta de los docentes que no haya sido incluida en el proyecto de ley», ejemplificó.