Tras conocerse del ingreso de otros nueve viajeros a la Argentina que dieron positivo a la variante Delta de coronavirus, iniciaron los controles del cumplimiento de la cuarentena, por lo que se encendieron las alarmas cuando se descubrió que uno de los infectados no se encontraba en su domicilio cuando fue visitado.
Se trata de un hombre de entre 34 y 35 años que vive en el barrio porteño de Palermo, tras haber regresado de Miami el pasado 26 de junio, pero cuando las autoridades fueron a visitarlo a su domicilio el 1° de julio no fue localizado. Luego, se conoció que había dado positivo a la variante Delta.
“En el marco de las constataciones que la Dirección Nacional de Migraciones lleva adelante junto a las fuerzas federales y en articulación con las jurisdicciones para verificar el cumplimiento de la cuarentena obligatoria para los argentinos que ingresan del exterior, el personal de Migraciones acudió a un domicilio en la ciudad de Buenos Aires el 1 de julio, para constatar si el pasajero llegado el 26 de junio procedente de Miami, Estados Unidos, cumplía con el protocolo de aislamiento”, explicaron desde el organismo.
“El personal de Migraciones, ante la imprecisa información aportada por el viajero en su declaración jurada, pudo constatar el piso de la vivienda, dado que solo había reportado la dirección de la propiedad horizontal, y finalmente se constató su ausencia. Aun así, el personal llamó por teléfono aportado por el viajero, también con resultado negativo”, agregaron.
Es por esto que, este martes, el organismo presentó una denuncia penal contra el hombre, quien habría presentado síntomas y tras hisoparse dio positivo a coronavirus, para luego confirmarse desde el hospital Niños Ricardo Gutiérrez que se trataba de la peligrosa variante Delta.
De los nuevos casos detectados seis son residentes de la ciudad de Buenos Aires y tres de la provincia de Buenos Aires. Luego de su arribo al país realizaron aislamientos en hoteles de la ciudad de Buenos Aires y domicilios.