El Gobierno anunció la ampliación de la cobertura del programa Hogar, a través del cual se subsidia parte del costo de la garrafa de gas a más de 2.8 millones de hogares y entidades de bien público de todo el país. El monto que se transfiere por garrafa a cada beneficiario aumentará de $338 a $414. De esta manera, el porcentaje subsidiado para una garrafa de diez kilos pasa del 65% al 80%.
La ampliación del subsidio significa un aumento de 23% respecto al monto subsidiado hasta el momento en materia de gas envasado (GLP) y representa la recuperación y puesta en valor del programa Hogar, una política destinada a los sectores más vulnerables de nuestra sociedad, que garantiza el derecho y el acceso a la energía a los hogares y entidades de bien público que no cuentan con conexión a la red de gas.
«La ampliación del programa Hogar permitirá reducir el costo de acceso a la garrafa de gas y alcanzar con el beneficio a más hogares», sostuvo el mistro de Economía de la Nación, Martín Guzmán, quien agregó: «Se trata de una política progresiva que cuida a los sectores más vulnerables, al mismo tiempo que trabajamos en mejorar la infraestructura para la provisión de gas natural en todo el territorio nacional».
Sobre el Programa Hogar
El programa Hogar es un subsidio directo otorgado por la Secretaría de Energía de la Nación, que garantiza el derecho y el acceso a la energía a hogares y entidades de bien público de todo el país que no cuentan con conexión a la red de gas natural por redes, al cubrir parte del precio de gas licuado de petróleo (GLP) envasado (garrafa).
En agosto, este programa benefició a 2.837.063 de hogares, con una inversión de $1.994 millones, que subsidió parte del costo de 5.899.973 garrafas. En lo que respecta a lo transcurrido de 2021, la cantidad de garrafas subsidiadas fueron 25.004.872, lo que comprendió una transferencia de recursos por un total de $9.607 millones por parte del Estado nacional.
Esta política de desarrollo e inclusión social creada en 2015 está destinada para sectores sociales residenciales de bajos recursos y entidades de bien público, como comedores, clubes de barrio, centros de atención infantil y comunitarios, entre otras, que no cuentan con servicio de gas natural o no están conectados a la red de distribución domiciliaria de su localidad.