El hecho sucedió el jueves. La Justicia investiga el caso.
En la madrugada del jueves, pasadas las 4 de la mañana, una pequeña de un año ingresó al hospital de General San Martín, pero llegó fallecida, según confirmó la médica en turno. La causa del deceso fue una “infección generalizada” (sepsis) y además registraba lesiones compatibles con quemaduras. Es por eso que se solicitó la intervención de un médico forense. En principio, la niña fue atendida en Pampa del Indio y la abuela indicó que “estaba siendo atendida por una curandera”.
La madre de la nena, una adolescente de 17 años, fue quien llegó junto a su hija al hospital de Pampa del Indio desde el Paraje Campo Nuevo. Tanto la mamá como la niña son aborígenes.
La bebé de un año fue llevada para una atención médica “con decaimiento, fiebre, hiporexia, vómito y diarrea, al ingreso a la guardia tenía piel mucosa pálida, pastosa, secas, genitales con dermatitis más hematomas en muslo por compresión del pañal”, según consta en el parte policial.
Se indicó que la madre dijo que “llevaba más de cuatro días de evolución dando infusiones caseras”. Ante el diagnóstico, se decidió que la pequeña sea trasladada a General San Martín, donde finalmente llegó muerta. La madrugada continuó con la Policía buscando a la abuela de la pequeña víctima, a quien pudieron encontrar después de las 5 de la mañana. Se trata de una mujer de 43 años.
Fue ella quien informó a los efectivos que su nieta “se encontraba enferma hace 4 días aproximadamente. Estaba siendo atendida por médica yuyera, también con domicilio en el paraje Campo Nuevo, que le estaba suministrando infusiones caseras”, tal lo informado por la Policía.