Durante una visita a la provincia de San Juan, Alberto Fernández alertó sobre «el mayor riesgo de que la puerta de salida sea el túnel del tiempo que nos acerque a un pasado que nos hizo mucho daño».
El presidente Alberto Fernández reafirmó este lunes que no negociará con el FMI «en ninguna cena», sino «discutiendo, preservando el derecho de los argentinos», y pidió de cara a las elecciones legislativas no «repetir errores» y estar «más unidos que nunca» ante «el mayor riesgo de que la puerta de salida sea el túnel del tiempo que nos acerque a un pasado que nos hizo mucho daño».
Fernández encabezó esta tarde un acto de campaña del Frente de Todos, en San Juan, en compañía del gobernador provincial, Sergio Uñac, ministros nacionales y precandidatos locales, donde se mostró convencido de que la Argentina avanza hacia la «puerta de salida» de la pandemia, a partir del plan nacional de vacunación, y enfatizó que «antes de pagarle al Fondo debo pagar un montón de deuda social en la Argentina».
Además, reivindicó las medidas de ayuda económica y de contención social de su administración durante la pandemia de coronavirus y pidió reflexionar sobre «todo lo que nos pasó y cómo debimos enfrentar el país que nos dejaron los que gobernaron los últimos cuatro años».
El mandatario reafirmó su decisión de optar por preservar «la vida y la salud de la gente» en la pandemia de coronavirus, aun con «consecuencias que no podríamos evitar, como que la economía se complique».
«Cuando la inmunidad se haya alcanzado entonces sí el horizonte nos va a mostrar esa puerta de salida y ahí tenemos que repasar todo lo que nos pasó y cómo debimos enfrentar esto con el país que nos dejaron los que gobernaron los últimos cuatro años», reflexionó el presidente.
El jefe del Estado agradeció el «acompañamiento de la mayoría» de quienes gobernaban las provincias en la gestión de la emergencia causada por el coronavirus, pero advirtió que parte de la oposición montó «un enorme show diciendo que ofrecíamos vacunas riesgosas».
En otro tramo de su discurso, Fernández reivindicó las medidas sociales y económicas desplegadas por su Gobierno para atender el impacto de la pandemia de coronavirus y aseguró que se trabajó «para que la economía se resienta lo menos posible y poder llegar a todo el país».
«Logramos preservar gran cantidad de pymes», aseguró el mandatario, que recordó que se dieron ayudas a través de la ATP y del IFE que «ayudó en toda la Argentina a 9 millones de personas», y refirió que «a ningún gobernador» se le preguntó «qué votaba y de qué color político era» y «a ningún intendente», porque la única preocupación «eran los argentinos».
«Nos preocupaban también los profesionales, monotributistas, los que tenían un quiosco, un barcito, y fuimos con créditos muy blandos, a tasa cero, que empezaban a pagar seis meses después de que les fueran otorgados», rememoró, y aseguró: «Cuando uno mira para atrás, vemos que hicimos absolutamente todo lo que estuvo a nuestro alcance».
«Nada de este tiempo fue fácil, pero en este tiempo pudimos llegar a los más necesitados; pudimos entregar 20 mil viviendas pensando en los derechos que tienen los argentinos», completó el mandatario.
Alberto Fernández destacó además el crecimiento que en los últimos meses se empieza a vislumbrar en muchos sectores de la producción y el crecimiento del empleo, indicadores que dijo evidencian que se está «en el camino correcto».
«Un mal resultado económico podemos revertirlo, pero una muerte no la podemos revertir», afirmó Fernández en el acto desarrollado en la Quinta Nazareno, en la localidad sanjuanina de Pocito, del que también participaron los ministros de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, y de Desarrollo Territorial y Hábitat, Jorge Ferraresi,
Advirtió sobre la dimensión de la deuda adquirida por el Gobierno de Mauricio Macri y, sin nombrarlo, subrayó: «Para el mundo entero, para arreglar el problema de la pandemia, el FMI dispuso 50 mil millones de dólares y alguien en Argentina tomó un crédito por 57 mil millones de dólares y todavía habla».
«Crece la economía, crece la industria, el empleo industrial y en la construcción; eso quiere decir que todo indica que estamos en el camino correcto», subrayó y pidió a los argentinos que «no desviarse de ese camino», porque cuando se tomó otro sendero se perdieron «23 mil pymes» y el país se endeudó «en 150 mil millones de dólares», que «no están en el ese barrio» que visitó hoy en San juan, por Sierras de Marquesado e Ingeniero Céspedes, «ni en ningún puente, ni en ninguna ruta», sino que «está en el exterior» porque esa política «estuvo hecha para que unos vivos ganen mucho y millones de argentinos pierdan».
«Aprendamos una vez de nuestra historia, aun cuando hagan mucho ruido, buscando en lupa de lo que nos equivocamos, pero lo que no van a encontrar es una cuenta mía en Caimán, Bahamas o Nueva York, o un hermano que haya hecho negocios con parques eólicos, autopistas u obra pública, porque no lo hacemos», completó.
Tras repasar la grave crisis de endeudamiento, económica y social heredada de la gestión anterior; el jefe de Estado pidió de cara a las elecciones legislativas no «repetir errores» y estar «más unidos que nunca», ante «el mayor riesgo de que la puerta de salida sea el túnel del tiempo que nos acerca a un pasado que nos hizo mucho daño», y remarcó: «Vamos a la puerta de salida a la vida que queremos».