Desde la Subsecretaría de Ganadería se ejecuta el Programa Provincial para el Control de la Rabia Paresiante que contempla cobertura a productores y la comunidad en general con foco en la prevención.
Al conmemorarse este 28 de septiembre el Día Mundial de la Lucha contra la Rabia, el Ministerio de Producción, Industria y Empleo refuerza el compromiso con la prevención de esta enfermedad zoonótica en toda la provincia. Mediante un trabajo articulado por la Subsecretaría de Ganadería, se ejecuta el Programa Provincial para el Control de la Rabia Paresiante que contempla cobertura a productores y la comunidad en general con foco en la prevención.
Esta tarea que encara la cartera productiva demanda el fortalecimiento y una mayor integración en territorio con el Senasa, el Ministerio de Salud Pública y todos los municipios de la provincia a fin de aplicar protocolos que permitan un accionar inmediato y directo ante la presencia del vector, su erradicación y avanzar en procesos de inmunización de los rodeos para evitar pérdidas de animales.
La fecha de conmemoración de la lucha contra la rabia fue instaurada por la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) en conmemoración del fallecimiento, el 28 de septiembre de 1895, de Luis Pasteur, químico y científico microbiólogo francés quien desarrolló la primera vacuna antirrábica en el mundo. Desde la Subsecretaría de Ganadería destacaron la importancia que posee la vacunación antirrábica en la prevención de esta enfermedad altamente letal que actualmente causa alrededor de 60 mil muertes en humanos por año en el mundo.
En tanto que desde la Dirección de Ganadería indicaron que el trabajo desplegado en toda la provincia apunta a disminuir el riesgo zoonótico ya sea por la posible agresión del vampiro transmisor hacia los animales o por la posibilidad de que las personas tengan contacto con animales de riesgo. Por otra parte, se hace foco en minimizar el impacto económico y sanitario en las producciones ganaderas.
El trabajo en terreno
Ganadería realiza el control epidemiológico de las poblaciones de vampiros, insistiendo en la vacunación del ganado bovino, equino, porcino, ovino y caprino en todos los establecimientos de los departamentos provinciales con mayor incidencia en la aparición de casos de la enfermedad, a lo que deben sumarse los animales de compañía.
También se recomienda la consulta inmediata al médico de confianza o al centro asistencial más próximo a su domicilio, en caso de haberse producido un hecho de contacto o accidente potencialmente rábico.
En cuanto a la rabia urbana o terrestre, la cartera productiva apoya al Ministerio de Salud Pública en la realización de campañas anuales de vacunación de mascotas en todo el ámbito provincial, para evitar enfermedades y que transmitan la enfermedad a las personas y a otros animales.
La rabia es una enfermedad que afecta fundamentalmente a los animales de sangre caliente, causada por un virus presente en la saliva y el tejido nervioso de los animales infectados, siendo generalmente mortal para el individuo que la padece.
La OIE establece obligaciones y elabora directrices para el control y diagnóstico de enfermedades de los animales, incluyendo las que se transmiten a las personas (zoonosis), para prevenir su difusión y también para la elaboración de vacunas para los animales. La rabia, en todas sus variantes, es una de las enfermedades de notificación obligatoria en todos los países del continente americano.
El ganado doméstico es el principal afectado por la rabia paresiante, transmitida a los bovinos por la mordedura del murciélago vampiro Desmodus Rotundus. Con una vacunación anual preventiva se disminuyen sensiblemente las pérdidas de ganado por la enfermedad al igual que los riesgos que representa para el personal que trabaja en establecimientos agropecuarios y frigoríficos.