Las camionetas son el tipo de vehículo con más demanda en el mercado de autos de segunda mano, pero, afortunadamente, también hay una gran oferta de donde elegir.
Lo que hay que tener en cuenta es que, al comprar una camioneta usada, se deben considerar ciertos aspectos diferentes a los que se analizarían en cualquier auto medio o pequeño, ya que este tipo de vehículos es sometido a mayores esfuerzos. Con estos tips es más fácil conseguir un coche usado que realmente valga la inversión.
El motor
Revisar que un motor esté en buen estado es una actividad compleja, en especial si no se tienen conocimientos de mecánica. Durante una primera revisión, hay que asegurarse que la camioneta no presente ningún tipo de pérdida de aceite o agua; observar si existe presencia de óxido en los componentes del motor y, al poner en marcha el auto, chequear la cantidad y el color del humo que sale por el escape.
El kilometraje
Al comprar camionetas usadas, lo ideal es que el kilometraje no supere los 100 mil Km. Sin embargo, más que el kilometraje, hay que tomar en cuenta la cantidad y frecuencia de los mantenimientos que ha tenido el vehículo, que debería ser una vez cada 5 mil o 10 mil Km,dependiendo del modelo. Si la camioneta ha pasado por servicio técnico autorizado cada vez que le correspondía, el kilometraje puede estar alrededor de los 150 mil Km sin problema.
La carrocería
El estado de la carrocería y pintura es una de las primeras cosas que hay que revisar antes de adquirir un vehículo de segunda mano. Comprobar que no existan ralladuras o abolladuras y que todas las puertas abran y cierren bien, incluyendo la del baúl. Si lo que se quiere es comprar una Pick-Up, también es necesario verificar la caja o parte trasera para asegurarse de que no tenga ningún daño.
Es de vital importancia preguntarle al vendedor si el auto estuvo en algún choque o si tuvo que someterse a reparaciones de carrocería; ya que esto podría afectar su funcionamiento. Los neumáticos también son una parte importante que necesita revisión.
El interior
El estado del interior de una camioneta es un indicativo del tipo de uso que se le ha dado. Si la camioneta es relativamente nueva, pero muestra un desgaste excesivo en su interior, es probable que se haya usado para trabajos pesados, lo que compromete el estado del motor.
Además de mirar los asientos, hay que observar en el estado de las alfombras, del recubrimiento del techo, del volante y las palancas. También es importante revisar la parte eléctrica del auto, como el sistema de seguridad, la mecánica de las ventanillas, las luces interiores y cualquier otro componente electrónico que esté incluido en el modelo.
Por último, siempre es prudente realizar una prueba de manejo, en donde comprobar el funcionamiento de los frenos, la suspensión y la tracción. En ese momento se pueden notar ruidos o fallas que solo se perciben con el auto en marcha.