Un proyecto de investigadores de la Unne y la Universidad del Sur, seleccionado a nivel nacional, trabajará en el desarrollo e implementación de un sistema de tratamiento para la remoción y reducción de niveles de arsénico de aguas subterráneas, con el fin de abastecer de agua segura a dos escuelas rurales del Chaco.
El arsénico (As) es un metaloide natural que se presenta usualmente en la corteza de la tierra y constituye uno de los contaminantes inorgánicos más tóxicos. La exposición de los seres humanos al elemento ocurre a través del consumo de agua y alimentos contaminados por este mineral.
La presencia de arsénico en el agua es una problemática que afecta a una gran cantidad de conglomerados urbanos en todo el país, específicamente en la región chacopampeana que abarca parte de La Pampa, Santa Fe, Córdoba, Catamarca, Chaco y Santiago del Estero.
En el Chaco existe gran población rural, y también urbana, que se abastecen de agua a través de aljibes en los que recolectan agua de lluvia mediante pozos que permiten extraer agua subterránea. Sin embargo, estos medios no cuentan con tratamientos para su uso.
En ese sentido, un grupo de investigadores de la Facultad de Ingeniería de la Unne, en conjunto con pares de la Universidad Nacional del Sur, se presentaron a una convocatoria nacional con el fin de lograr el financiamiento para el desarrollo de dispositivos de bajo costo, fácil operación, escalables y ecoamigables que contribuyan a resolver la actual problemática del acceso al agua segura en comunidades educativas rurales del Chaco.
Así, el proyecto resultó seleccionado por el programa Impact.AR Ciencia y Tecnología, en el marco de una convocatoria del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación que posibilitó la financiación de 31 proyectos a nivel país.
«El objetivo general del proyecto, que se iniciará próximamente, consiste en diseñar, desarrollar e instalar un sistema destinado a la remediación de aguas, de origen subterráneo, en dos escuelas rurales de la provincia, ubicadas en los departamentos Almirante Brown y General Güemes, respectivamente», explicó el ingeniero Sergio Roshdestwensky, director del proyecto e investigador de la Facultad de Ingeniería de la Unne.
Según detalló, se espera que las soluciones se puedan instalar, operar y mantener fácilmente en las escuelas mencionadas por parte del personal de la misma y que, en caso de resultar exitosa la propuesta en esas escuelas, pueda ser replicado el sistema en otras instituciones.
El proyecto cuenta con la participación del Laboratorio de Química de la Facultad de Ingeniería de la Unne y el Instituto de Química del Sur (Inquisur), dependiente de la Universidad Nacional del Sur.
DETALLES
DEL SISTEMA
El proyecto, por iniciarse, prevé como primera etapa el desarrollo de un sistema de filtrado por adsorción, constituido por columnas rellenas de un material adsorbente novedoso compuesto en gran proporción por residuos de biomasa agrícola y de la industria de la construcción, y nanopartículas inorgánicas.
El sistema de filtrado incluye por un lado los Nanocompuestos (NCs) a base de residuos de biomasa y nanopartículas magnéticas, que constituyen el componente activo con capacidad para retener arsénico.
Por otra parte, el filtrado incluye el sistema de columnas donde se encuentran los NCs empaquetados.
Los lechos de la columna pueden operar de distintos modos para el filtrado y fijación de los materiales de interés, como el arsénico.
Particularmente, el proyecto de los investigadores de la Unne y la UNS plantea la implementación de la adsorción en columna de lecho fijo y flujo continuo, que suele ser una de las alternativas más empleadas a nivel industrial debido a que permite procesar grandes volúmenes de agua, permitiendo evaluar el comportamiento del sistema «adsorbente-adsorbato» durante su operación.
Una vez implementado en las escuelas el sistema de filtrado por columnas rellenas y comprobada la aptitud del agua filtrada, se proyectará la segunda etapa de implementación de sistemas de reservorio.
Esta segunda etapa prevé instalar en las escuelas un reservorio o tanque para acumular el agua subterránea extraída de pozo o bombeo, y desde ese primer reservorio el agua sería bombeada hacia el equipo de columna de filtrado, luego de lo cual pasaría un segundo reservorio donde quedaría depositada el agua filtrada, ya apta para consumo.
El alcance de la solución propuesta mediante el proyecto involucra la instalación, capacitación y operación de los sistemas para que puedan ser operados por los responsables o integrantes de las escuelas.
PROYECTO ESCALABLE
«Si bien el proyecto prevé trabajar con dos escuelas rurales de la provincia, en realidad busca ser un puntapié para posteriormente replicar la iniciativa en otras instituciones» destacó Roshdestwensky.
En esa línea, comentó que se espera realizar un relevamiento acerca de la calidad del agua en otras escuelas de la región y estudiar la capacidad de los adsorbentes propuestos para reducir las concentraciones de As en matrices diferentes de agua, mediante ensayos a escala laboratorio.
Esto permitirá ajustar el diseño de los sistemas de columnas de acuerdo a los requerimientos y extender, a futuro, la instalación de los mismos o similares a escuelas con matrículas más grandes para tratar volúmenes de agua más importantes.