Los indicadores ilustran las desigualdades que enfrentan las mujeres en Argentina. En la actualidad, en el gabinete nacional hay solo 2 mujeres con cargo de ministras: Carla Vizzoti, en Salud; y Elizabeth Gómez Alcorta, en el ministerio de Mujeres, Género y Diversidad. A nivel provincial, la mayor participación de mujeres como ministras en los gabinetes se da en Tierra del Fuego (56%), Entre Ríos (50%) y Santa Fe (46%), de acuerdo con un relevamiento realizado por la Dirección Nacional de Economía, Igualdad y Género del Ministerio de Economía nacional.
En La Rioja no hay ministras provinciales (Florencia López ocupa el cargo de Vicegobernadora) y en La Pampa y Salta representan solo el 11% en ambos casos.
En el Congreso, por su parte, la participación de las mujeres se ve afectada por la Ley de Paridad de Género, en vigencia desde 2017. Sin embargo, todavía no se alcanza una presencia de 50/50 entre los géneros.
En la Cámara baja, las diputadas son 115 (45%) frente a 142 diputados (55%), de acuerdo con la información provista por el mismo organismo. Mientras tanto, en la Cámara alta, las senadoras son 31 (43%) y los senadores 41 (57%).
En tanto, en el Poder Judicial la mayoría de los magistrados designados son hombres. Hasta diciembre último, el presidente Alberto Fernández designó a 32 jueces federales y 11 juezas federales. En el ámbito de la Justicia Nacional se acercó un poco más a la paridad, con 30 jueces y 25 juezas, de acuerdo con datos del ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación.
Durante la Presidencia de Mauricio Macri, se designaron en la Justicia Federal 70 jueces y 23 juezas; y en la Nacional, fueron 56 juezas y 49 jueces. Este es el único caso desde el ’83 en el que se designaron más magistradas que sus pares masculinos en este fuero en particular.
La desocupación afecta más a las mujeres que a los varones, y en especial a mujeres jóvenes de entre 14 y 29 años, de acuerdo con los últimos datos del INDEC.
Además, se observa una diferencia en los ingresos. En promedio, los varones tienen un ingreso 40% superior al de las mujeres, según ilustran los datos del INDEC.
En el sector privado también se observa una similar dificultad de las mujeres para alcanzar los puestos más altos, como ocurre en el sector público. Del total de sociedades anónimas constituídas ante la Inspección General de Justicia (IGJ) hasta el 31 de diciembre último, solo el 25,5% tiene a mujeres entre sus autoridades.
El porcentaje más alto entre las entidades se da en los casos de las asociaciones civiles, que llegan a un 35,9% de mujeres al mando.
Fuente: Chequeado