Con el Domingo de Ramos comenzó ayer la Semana Santa para los católicos. En la Iglesia Catedral, el arzobispo de la Arquidiócesis de Resistencia, monseñor Alfredo Dus, celebró la misa principal en la que instó a transitar estos días con las enseñanzas de Jesús. «Así como las palmas y los olivos que bendecimos hoy, son mensaje de paz y de esperanza en el nombre de Dios, también la palabra nos invita a tener la seguridad de que Dios es fiel y que hará todo lo posible por salvar a sus hijos, por rescatarnos por hacernos vivir una vida plena, feliz en el amor», manifestó.
En esta celebración se realizó la tradición bendición de ramos y olivos, que representan las ramas de palma que la multitud esparció frente a Cristo mientras él entraba en Jerusalén.
El párroco Alberto Fogar reflexionó: «La Pascua de Jesús, próxima a celebrar, trae el impulso que necesitamos para cambiar en sus causas más profundas. Porque a la hora de saber cómo es posible superar los males que nos aquejan, la propuesta cristiana es transformar la realidad por la cruz y la resurrección de Cristo, y renovar todas las actividades y obras humanas; las cuales, a causa de la soberbia y el egoísmo, conducen a complicar el porvenir».
Durante la primera misa dispuesta ayer en la parroquia San Fernando, monseñor Dus predicó el evangelio de San Lucas, en las que instó, al igual que señalan las escrituras mencionadas, a «poner en las manos del Padre las pasiones que vivimos, los sentimientos, las esperanzas que tenemos, también las angustias que nos asaltan, por nosotros, por la iglesia, por los pueblos que sufren la guerra y viven la falta de paz, como una ofrenda porque sabemos que el único que puede transformar las cosas es Dios con su espíritu y gracia que, como decíamos, a pesar de nuestros males, saca bienes con su presencia y su amor», sostuvo.
«Por eso hoy le pedimos al Señor, en este relato de la Pasión, que crea este clima de acompañar a Jesús en esta Semana Santa a través del reconocimiento de su amor, expresado de esta manera, con tanto sufrimiento, pero también como la expresión más grande de su entrega, que nosotros también recibamos estas palabras, de saber perdonar, de estar seguro del amor del Padre y encomendarnos a las manos de Dios, para que nos sirva de confianza y de consuelo en este momento para vivir este tiempo presente para poder vivir como Jesús.
Semana Santa
Domingo de Ramos: Se celebra la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén. En todas las iglesias se hace una procesión con ramos benditos y cantos que recuerden a la multitud que aclamaba al Mesías. Con el Domingo de Ramos se da inicio a la Semana Santa y los católicos se disponen a acompañar a Jesús en su dolor y en su Gloria de Resurrección.
Miércoles Santo: Se celebra la misa crismal. El crisma son aceites consagrados para los sacramentos del Bautismo y Confirmación. También en la consagración de obispos, la ordenación de los presbíteros, la dedicación de las nuevas iglesias y del nuevo altar. La unción con el crisma representa también la plena difusión de la gracia. Los otros óleos consagrados son: el de los enfermos, llamado «unción de los enfermos» y el óleo de los catecúmenos.
Jueves Santo: Este día se celebra la misa en la cual recuerda la Última Cena, que fue en la cual Jesús compartió la última vez con los discípulos a la mesa, también enseñó que con el gesto del lavado de los pies no existe diferencia entre maestro y discípulo. Este día recuerda la Última Cena de Jesús con sus discípulos en la que les lavó los pies dándonos un ejemplo de servicialidad en la última cena. «Jesús se quedó con nosotros en el Pan y Vino, nos dejó su Cuerpo y Sangre. Es el Jueves Santo, cuando instituyó la Eucaristía y el Sacerdocio», recuerdan.
Viernes Santo: Este día recuerda cuando Jesús muere en la cruz para salvar a la humanidad del pecado y dar la vida eterna. El sacerdote lee la pasión de Cristo en la liturgia de la adoración a la cruz. Ese día no se celebra la Santa Misa.
En las iglesias, las imágenes se cubren con una tela morada al igual que el crucifijo y el sagrario está abierto en señal de que Jesús no está. El color morado en la liturgia de la Iglesia significa luto. Se viste de negro la imagen de la Virgen en señal de luto por la muerte de su Hijo. Este día manda la Iglesia guardar el ayuno y la abstinencia. Se acostumbra rezar el Vía Crucis y meditar las Siete Palabras de Jesús en la cruz. Se participa en la Liturgia de Adoración a la Cruz con mucho amor, respeto y devoción. Se trata de acompañar a Jesús en su sufrimiento.
Sábado Santo: Se recuerda el día que pasó entre la muerte y la resurrección de Jesús. Es un día de luto y tristeza pues Jesús no está. Las imágenes siguen cubiertas y el sagrario abierto. Es un día de silencio, reflexión y meditación, a la vez acompañamos a María en el dolor de perder a su Hijo. Por la noche se lleva a cabo la vigilia pascual para celebrar la resurrección de Jesús. Vigilia que significa «la tarde y la noche anterior a una fiesta». En esta celebración se acostumbra bendecir el agua y encender las velas en señal de la Resurrección de Cristo.
Domingo de Pascuas: En este domingo radiante de vida, la Iglesia invita a participar del gozo de la Resurrección del Señor. Invita a participar (no a mirar desde fuera), a hacer nuestra esta alegría, como cuando se toma parte en una fiesta… Y esta es la fiesta más grande: la Pascua: la del Señor.
» Cronograma de misas
LUNES SANTO
Hoy: 20 – Misa presencial y virtual
MARTES SANTO
Mañana: 9.30 – Confesiones
20 – Misa presencial y virtual
MIÉRCOLES SANTO
13 de abril: 19 – Misa Crismal en Puerto Tirol
20 – Celebración de la Palabra parroquia San Fernando
JUEVES SANTO
14 de abril: 20 – Misa de la Cena del Señor. Presencial y virtual
21 – Adoración al Santísimo hasta la medianoche
VIERNES SANTO
15 de abril: 9 – Confesiones y visita al templo
17 – Celebración de la Pasión del Señor. Presencial y virtual
18.30 – Vía Crucis alrededor de la plaza. 20 – Visita al Cristo Yacente.
SÁBADO SANTO
16 de abril: 20 – Solemne Vigilia Pascual. Preside monseñor Ramón Dus. Misa presencial y virtual
DOMINGO DE RESURRECCIÓN
17 de abril: 8 – Misa presencial
10 – Misa presencial y virtual. Preside monseñor Ramón Dus
20 – Misa presencial