Los sospechosos del linchamiento fatal de Gustavo Rufino, hace poco más de una semana en Sáenz Peña, fueron detenidos ayer al mediodía.
Todas estas personas fueron trasladadas hacia la Termal por la Policía de la División Investigaciones Complejas Interior.
Los efectivos lograron la aprehensión de cuatro personas que estarían involucradas en el homicidio sucedido en el barrio Santa Mónica, el pasado 13.
Para el arresto contaron con la colaboración de Mariela Benavento, presidente del foro de la comisaría Tercera local, quien llegó a contactar a las cuatro personas sindicadas como autoras del homicidio de Rufino.
También se contó con el asesoramiento del doctor Daniel Burlli, abogado de los acusados.
LOS DETENIDOS
Se trata de Daniel P. alias Rana, Sebastián G. a quien llaman La Gata, Roberto P. alias Robert y Delia P., quienes estaban en Resistencia y serán presentados ante la Fiscalía 3, a cargo de Marcelo Fabián Soto.
EL HECHO
A mediados de este mes, un chico asesinó a otro durante la madrugada: unos 300 vecinos decidieron vengarse del agresor, pero mataron a golpes a su padre y le incendiaron la vivienda.
Los investigadores aseguraron que el joven (17) fue detenido luego por la Policía, mientras que tres vecinos que aparentemente participaron del linchamiento también fueron apresados y quedaron a disposición de la Justicia.
Fuentes policiales informaron que el hecho inicial tuvo lugar durante la madrugada del 13 pasado. Paramédicos a bordo de una ambulancia fueron alertados por la presencia de un hombre tendido en el suelo y lo trasladaron al hospital, donde llegó sin signos vitales.
El fallecido fue identificado por los investigadores como Luis Pereyra (35), quien pertenecía a una comunidad originaria, según especificaron los voceros. A su vez, las fuentes confirmaron que la muerte de Pereyra fue causada por un fuerte traumatismo en el cráneo.
En tanto, la ex de Pereyra denunció que el sujeto había tenido una discusión con dos hombres durante la madrugada, que vivían tan solo a una cuadra de su domicilio, y que lo asesinaron.
Al parecer, el chico sería hijo de Gustavo Rufino (35). Ante esa situación, alrededor de 300 vecinos del barrio Santa Mónica se dirigieron al domicilio de los acusados, ubicado en la calle 33, entre 20 y 22.
En ese lugar solamente encontraron a Rufino, a quien mataron a golpes y, tras consumar el asesinato, prendieron fuego su casa y su cuerpo.