Tras la aprobación por el Concejo de Resistencia, del Código Único de Transporte, que prohíbe la tracción a sangre en la ciudad, se busca extender esta medida al resto de la provincia. El diputado provincial Rodrigo Ocampo en este sentido presentó el proyecto de ley 1911/22, esta prohibición se realizará mediante la reconversión de este sistema.
Según la iniciativa la medida se implementará a través del Programa de Abordaje y Reconversión de la Tracción a Sangre. «La propuesta alcanzará a los once municipios de mayor densidad poblacional de la provincia, entiéndase a aquellos de 20 mil a 50 mil habitantes. Los concejos deliberantes deberán tratar la adhesión municipal a través de ordenanzas» indican los fundamentos del proyecto.
El proyecto que busca la preservación de los animales manifiesta «El plazo de sustitución y reconversión será de 24 meses, erradicando en este tiempo la utilización animal para tareas de tiro y arrastre. Considerando una debida instrumentación en materia de registro e implementación».
El legislador sostuvo que «lo que se busca es eliminar la explotación animal, garantizar mejores condiciones para el tránsito y promover el desarrollo humano para aquellas personas que necesiten de medios de transporte alternativos para cargas livianas».
En la Legislatura trabajan en otras iniciativas sobre la temática, uno presentado por la diputada Elida Cuesta y algunas presentadas en años anteriores.
el fin de la explotación animal
En contacto con Radio Libertad, Ocampo brindó detalles de su propuesta: «La visión es justamente poder eliminar definitivamente la tracción a sangre en nuestra provincia, entendiendo primero y principal la necesidad de eliminar la explotación animal, nos parece que este es un principio del derecho animal, pero fundamentalmente desde la regulación ambiental, también la importancia que sean los municipios de mayor densidad poblacional quienes lo tengan que trabajar porque fundamentalmente tiene un impacto positivo en el tránsito, es decir en la movilidad urbana», explicitó. «Comprendemos que en zona rural en lo periurbanos, los carros, el sistema de tiraje, es un sistema que todavía se sigue utilizando no solamente para la recolección, sino también para el transporte y, por lo tanto, esto nos parece que puede ser previsto en otros puntos de la provincia», diferenció. «Pero en el caso particular de los municipios de mayor densidad poblacional lo que se ve, se identifican los carros en definitiva son un medio de transporte de carga liviana, por lo tanto es importante ir sustituyendo este transporte por tiraje a una logística a motor, que, en definitiva, puede ser motocarga o algún tipo de transporte alternativo que le da la posibilidad aquellas familias que se dedican justamente a esta actividad a poder organizarse», detalló.
Asimismo, destacó que «justamente es el estado un actor fundamental en este sentido porque por supuesto que hay que hacer una inversión, hay que prever un programa de capacitación para lograr un proceso de reconversión, esa es la visión que tenemos con respecto a la temática».
En este sentido, el legislador recordó que «Jorge Capitanich, durante su mandato como intendente de Resistencia y el mío como concejal, lo charlamos mucho al tema e impulsamos en ese momento la importancia de que la gente pueda votar, durante la elección a intendente de 2019, su posición respecto a la tracción a sangre; recuerdo que mayoritariamente casi el 90% de la población de Resistencia pidió que se regule, y fue la base de que hoy se pueda tomar una decisión en el Concejo Municipal», afirmó. «Lo mismo tenemos que hacer en la Legislatura, dejar sentada la base, votar una ley y trabajar a partir de la sanción en un programa de 24 meses, que es lo que prevé la ley, para hacer el proceso de reconversión, no solamente a Resistencia, a la zona metropolitana, sino también a otros nodos de la provincia, como es el caso de la zona centro con Sáenz Peña, Machagai, Quitilipi, San Martín, Castelli, Charata, Las Breñas, Villa Ángela, distintos municipios de categoría de la provincia que dan la pauta para empezar a trabajar en eso».
«En definitiva, no es solo un proceso de eliminación de tracción a sangre, sino también de sustitución, y este proceso va de la mano de la economía popular, del cuidado de la actividad que muchas familias realizan a partir de justamente tener su carro», reconoció.
El diputado indicó que existen en la misma dirección otros proyectos presentados «la propia presidenta de la Legislatura ha hecho la presentación de un proyecto y seguramente vamos a trabajar en la unificación de todas las propuestas en una sola iniciativa, hay otros de años anteriores que nunca fueron tratados», precisó. «Por momento da la sensación de que es contra viento y marea pero es un tema importante, son los temas más incómodos que hay que abordar y son los que mayor certeza dan y digo hace tiempo y vengo insistiendo, que no solamente hay que discutir cuestiones de coyuntura, sino cuestiones más estructurales que hacen a modificar algún paradigma de nuestra sociedad, la tracción a sangre fue un tema muy complejo para Resistencia que en algún momento se pudo abordar y creo que es igual para los distintos puntos de la provincia y hay que abordarlos y discutirlos no solo para resolverlo en las grandes ciudades, sino también para permitir que la zona rural y periurbano siga funcionando, por supuesto que puede convivir una cosa con la otra y podemos de hecho pensar en una línea de tiempo en la que la progresividad de los hechos nos permita ir resolviendo toda la cuestión».