El intendente de Resistencia, Gustavo Martínez, completó el pasado miércoles la 25a Cabalgata de la Fe, peregrinación religiosa que transita unos 75 kilómetros, convoca a más de 15 mil jinetes y a cerca de 70 mil personas. «A San Pantaleón en especial, el pedido es siempre por la salud de un ser querido, de la familia y de nuestro pueblo», dijo tras la misa.
Luego de una segunda jornada menos agotadora que la primera, Gustavo llegó junto a todos los peregrinos para participar del oficio religioso central en honor a San Pantaleón.
En ese marco, el jefe comunal de Resistencia resaltó que se trata de «una gran demostración de fe, pero también en un evento social, cultural y económico», y celebró, además, el impulso económico que el encuentro genera para el interior: «Habíamos presentado en la Bienal, junto a la Fehgra, el turismo de la fe y vemos aquí más de 70 mil personas que invierten en hotelería y gastronomía local».
Al respecto, insistió: «Más de 500 emprendedores que trabajan, que llevan el sustento a sus casas, vienen de toda la provincia también para poder trabajar; así que la verdad se trata de un acto muy importante de fe que debemos respaldar».
«RECUPERAR
LA FE»
Esta nueva edición de la Cabalgata de Fe llegó en un momento en el que el país se encuentra bastante convulsionado. Ese fue uno de los aspectos en los que el intendente de Resistencia analizó la importancia de las demostraciones de fe masivas.
Según dijo, «hay dos cuestiones, primero, hoy la gente necesita recuperar la fe; por eso tenemos que agradecerle a Dios que nos haya permitido llegar hasta acá, que haya cuidado nuestros animales y nos haya dado la fuerza para llegar, y también agradecer a Dios que la gente vuelva a recuperar la energía a través de la fe para crecer, desarrollarse y multiplicar sus expectativas que, ante tantos problemas, somos carentes de fe», se explayó.
SIN BANDERÍAS POLÍTICAS
En la primera jornada de la cabalgata se había viralizado una foto que el propio Gustavo Martínez subió a sus redes junto al exgobernador Ángel Rozas. Al ser consultado por las lecturas de ese encuentro, fue claro: «Es importante mostrarle a la gente que hay cuestiones como la fe y las acciones buenas para el Chaco que no tienen banderías políticas, que no debemos contaminar lo bueno con los problemas de la política; por eso, más allá de que esto haya sido relacionado con un color político durante muchos años porque lo inició Ángel Rozas, tenemos que estar igual acompañando con mucha humildad, porque necesitamos resaltar esto permanentemente para ver si podemos encontrar el camino para juntarnos y dejar de pelearnos tanto por expectativas personales o sectoriales y empezar a pensar en serio en la gente».