Hoy se conocerán los alegatos de la defensa de Melisa Vallejos, en la persona del defensor oficial 3, Simón Bosio; y de los abogados defensores de Héctor Gómez, Benito Colaneri y Edgardo Flores, respectivamente. La mujer es una de las acusadas de matar a su beba en el sonado caso de la menor de edad, cuya autopsia realizada al cuerpo de la criatura determinó que tenía clavadas dos agujas de coser. Fue en 2019 en Quitilipi.
En la Cámara Segunda en lo Criminal de Sáenz Peña se desarrolla el juicio que tiene a Vallejos y a su pareja, Héctor Gómez, imputados por tentativa de homicidio agravado por el vínculo, por ensañamiento y alevosía, homicidio agravado por el vínculo y alevosía, todo en concurso real.
EL HECHO
La muerte de la pequeña ocurrió en el barrio Industrial de Quitilipi en marzo de 2019 y conmocionó a toda la provincia. La beba fue ingresada al hospital 4 de Junio en grave estado de salud y falleció producto de un paro cardiorrespiratorio.
En ese marco, la Policía tomó conocimiento del caso luego de que la menor de edad fuera llevada al hospital local por su madre, de 20 años en aquel momento.
La médica que recibió a la niña constató una serie de hematomas, lesiones en el cuerpo y dilatación en sus partes íntimas. A partir de ahí, el fiscal Cristian Arana, a cargo de la Fiscalía 1 de Sáenz Peña, inició la investigación del caso.
Los forenses habían encontrado dentro del cuerpo de la pequeña dos agujas de unos diez centímetros aproximadamente.
En ese sentido, explicaron que «la nena tenía dentro del cuerpo dos agujas, una estaba lesionando la parte inferior del lóbulo pulmonar derecho y la otra estaba en la zona del timo, la cual segregaba secreciones, generaba pus, era de vieja data y no se encontró el orificio de entrada. Todo esto generó una asepsia, se encontró en los riñones pus, un pulmón inflamado y, en principio, esas serían las causales del paro cardiorrespiratorio».