La Delegación de la Policía Federal en Presidencia Roque Sáenz Peña quedó en estado de acefalía tras los procedimientos policiales ordenados la semana pasada por la Justicia Federal.
Fuentes consultadas por Periodismo365 confirmaron que el subcomisario que hasta el jueves era el jefe de la unidad, también habría quedado preso junto a otros cinco efectivos; estando a cargo provisoriamente una oficial mientras se espera la asunción de un nuevo jefe designado por la superioridad, proveniente de otra provincia.
En ese contexto, las mismas fuentes detallaron que al estar preso el exjefe de la División Unidad Operativa Federal Sáenz Peña (exdelegación), en las próximas horas se espera la llegada de un reemplazante, quien se haría cargo de la unidad y de sus 130 efectivos en las próximas horas.
Los efectivos detenidos son todos integrantes de la Brigada de Investigaciones Complejas de la Policía Federal y se dedicaban oficialmente a la prevención del narcotráfico, contrabando y trata de personas, entre otros trabajos prevencionales de delitos del ámbito federal.
En ese contexto y con el escándalo ya desatado, arribaron a Sáenz Peña los jefes de las delegaciones regionales con asiento en Corrientes, todos comisarios de alto rango e integrantes de la Jefatura General, para seguir con el escándalo.
EL HECHO
La jueza federal de Resistencia, Zunilda Niremperger, comentó que este operativo se realizó a partir de una investigación iniciada por el fiscal Patricio Sabadini. Fue luego de que un vecino de Resistencia denunciara que fue interceptado por un patrullero de la Federal a la altura de Sáenz Peña, quienes lo coaccionaron para que les entregue dinero a cambio de mantener su libertad debido a que se había constatado que en el baúl del auto tenía indumentarias sin la factura respaldatoria.
Al explicar que no tenía plata en el lugar, los policías lo escoltaron hasta su casa en Resistencia. Ingresaron al lugar, se hicieron de distintas pertenencias y luego abandonaron la capital chaqueña para regresar a Sáenz Peña. A los seis policías se les imputa los delitos de privación ilegítima de la libertad, allanamiento ilegal, incumplimiento de deberes de funcionario y robo agravado por la calidad de funcionario.