Con enero en su tramo final, se acerca el momento de comenzar a definir las pautas salariales y es por esto que desde los diferentes sectores laborales ya comenzaron a preparar el terreno para las discusiones paritarias.
En la provincia, este se es el caso del Frente Gremial Docente, conformado por los sindicatos locales Atech, Utre-Ctera y Sadop, que reivindicaron la cláusula gatillo como herramienta fundamental de la política de recomposición salarial, como quedó demostrado durante 2022.
En este sentido informaron que con los sueldos correspondiente a enero debe cobrarse un porcentaje de incremento por encima del 16% para corregir el desfasaje por inflación del último trimestre de 2022, con la aplicación de la cláusula gatillo a tal efecto, con lo cual se cierra «pauta del año pasado». Recordaron además que tal incremento debe ir direccionado al valor del punto -sueldo en blanco- que repercute sobre todos los rubros del haber.
Asimismo, señalaron que, en cuanto a la pauta salarial 2022 definida por la docencia chaqueña a través del Frente, en el año anterior recientemente culminado los docentes activos y jubilados del Chaco obtuvieron un 15% de incremento de recomposición salarial, por encima de la inflación.
Si bien desde este espacio reconocieron que «que todo sigue siendo insuficiente en semejante contexto de crisis socioeconómica, es indiscutible que la pauta definida por la docencia de la provincia, a través del espacio gremial, fue positiva». Y compararon el justo reclamo de distintos sectores de trabajadores para la reapertura de sus respectivas paritarias, «por la sencilla razón de no contar con la herramienta de la cláusula gatillo, que hace totalmente imprevisible la justa corrección del porcentaje de inflación concreto del año, por lo que se valora aún más su vigencia plena en la pauta salarial del sector docente del Chaco», resaltaron.
Por eso, de cara a la pauta salarial de 2023, desde el frente ratificaron su posición «exactamente con los mismos criterios que para la del año anterior: cláusula gatillo, más política de recomposición salarial, todo direccionado al valor del punto, abarcando a la totalidad de los docentes, -activos y jubilados», anticiparon desde este espacio.
la pAUta
salarial 2023
En estos días el ministro de Economía, Sergio Massa, y la ministra de Trabajo Kelly Olmos, mantienen reuniones con dirigentes sindicales con quienes debaten la intención de ponerle un tope del 60% a las paritarias salariales para este año. La propuesta está a tono el Presupuesto 2023, donde fijan un 60% de inflación para este año.
La intención es un 30% de aumento y en varias cuotas, en cada semestre del año.
Dirigentes de la CGT, más afines con el Gobierno, ya aceptaron la propuesta. Mientras que la UTA está por firmar en ese sentido su paritaria y gremios como la Bancaria, de Sergio Palazzo, estarían dando el visto bueno. Desde Ctera o las CTA, con dirigentes gremiales más cercanos a Cristina Fernández, se mantienen en silencio.
Para el Gobierno, la intención sería «bajar las expectativas inflacionarias» en este año,
Los pedidos de algunos gremios
La Unión Tranviarios Automotor (UTA) busca acordar una suba del 31% de los salarios, durante seis meses, abonados en tres tramos; más una cláusula de revisión en julio.
Asimismo, desde la Asociación Bancaria se buscará aumentos para enero, febrero y marzo, cuando también tratarán de definir un acuerdo anual.
Asimismo, a nivel nacional los trabajadores estatales reclamaron reabrir de inmediato la paritaria para revisar los aumentos de 2022 e incorporar una suma fija de $30 mil.
La Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) envió cartas a la ministra de Trabajo y a la secretaria de Empleo Público, Ana Castellani, luego de que se conociera el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de diciembre, que fue del 5,1%, y con ese dato el aumento de precios de todo el año, en un 94,8%. El documento firmado por Hugo Godoy, los secretarios adjuntos y de Organización, Rodolfo Aguiar y Mercedes Cabezas, y el director de Negociación Colectiva del gremio, Flavio Vergara, indicó que el pedido se debe «al constante proceso inflacionario que conspira contra los trabajadores».
«El salario no alcanza. Todavía existen compañeres con salarios por debajo de la línea de la pobreza: algunos convenios colectivos de trabajo sectoriales inician en niveles salariales muy inferiores a la Canasta Básica Alimentaria. No se puede naturalizar que quienes trabajen en el Estado nacional sean pobres», indicó el sindicato.