Ayer, 23 de mayo, se conmemoró el Día Mundial del Melanoma, una fecha en la que se busca generar conciencia y promover acciones concretas para combatir esta enfermedad. Entre estas, se encuentra la campaña de prevención y diagnóstico oportuno #MelaNoMás, realizada por Bristol Myers Squibb (empresa farmacéutica), junto a la Asociación Argentina de Oncología Clínica (AAOC) y con el apoyo de la Liga Argentina de Lucha contra el Cáncer (Lalcec).
Esta campaña impulsa a las personas a tomar un rol activo y protagónico en la prevención y detección de este cáncer, a través de herramientas como la regla ABCDE, que permite autochequearse los lunares.
El melanoma es un tipo de cáncer de piel que se desarrolla cuando los melanocitos (las células que le dan color bronceado o marrón a la piel) comienzan a crecer sin control. Es menos frecuente que otros tipos de cáncer de piel, aunque es más peligroso por su capacidad de invadir a otras partes del cuerpo si no se realiza un diagnóstico temprano.
En la Argentina se diagnostican más de 1.700 casos por año y, según las proyecciones de Globocan (Global Cáncer Observatory), para 2040 esta cifra aumentará a más de 2.400, un 41% más que los registrados en 2020. En el mundo, se produjeron 324.635 casos nuevos de melanoma, de los cuales 18.881 corresponden a Latinoamérica.
El abcdE de la prevención
La campaña #MelaNoMás propone un mensaje directo que apela a la acción, con el objetivo de concienciar a la sociedad sobre la importancia de cuidar la piel y controlar los lunares de forma anual para fomentar la prevención y la detección temprana de este tipo de cáncer.
En ese sentido, y bajo el concepto «decirle no más al melanoma depende de vos», la iniciativa evidencia la importancia del autochequeo de la piel, utilizando como herramienta clave la regla ABCDE , a la vez que promueve la visita anual al dermatólogo.
La regla del ABCDE sirve para que cada persona pueda distinguir en su propia piel un lunar normal de un melanoma. La misma significa:
-Asimetría: una mitad del lunar o marca de nacimiento no corresponde a la otra mitad.
-Borde: los bordes son irregulares, desiguales, dentados o poco definidos.
-Color: el color no es uniforme y pudiera incluir sombras diferentes de color marrón o negras, o algunas veces con manchas rosadas, rojas, azules o blancas.
-Diámetro: el lunar mide más de 6 milímetros de ancho (alrededor de ¼ de pulgada o aproximadamente del tamaño del borrador de un lápiz), aunque los melanomas algunas veces pueden ser más pequeños que esto.
-Evolución: el tamaño, la forma o el color del lunar están cambiando.
Si bien este autochequeo no reemplaza a la visita anual al dermatólogo, se recomienda realizarlo al menos una vez por mes, sin omitir la revisión de la espalda, los pies y la zona de genitales.
«El melanoma representa, aproximadamente, el 4% de los cánceres de piel. Hay un abismo de diferencia entre la detección precoz y no llegar a tiempo. Siempre decimos que es un tumor que está a la vista, porque lo tenemos en la piel, así que es fácil de detectar, hay que ir al dermatólogo para que nos revisen y llegar a tiempo», explica la doctora María Florencia Cuadros (MP 15733), oncóloga clínica, especialista en Melanoma y miembro de la AAOC.
Factores de riesgo
Existen varios factores de riesgo que pueden hacer que una persona sea más propensa a desarrollar melanoma:
-Lunares: tener muchos o tener lunares atípicos.
-Tipo de piel: las personas de piel blanca o de piel clara que se queman fácilmente con el sol tienen mayor riesgo.
-Exposición a la luz ultravioleta (UV): la piel absorbe de forma continua y «acumulable» la radiación UV que emite el sol.
-Historia familiar: el riesgo se incrementa si uno o más parientes de primer grado (padres, madres, hermanos/as o hijos/as) han tenido melanoma. Alrededor del 10% de todas las personas con melanoma tienen antecedentes familiares de la enfermedad.
-Bebés: los bebés menores a 1 año deben evitar completamente la exposición al sol.
Para prevenir este cáncer en particular, es importante cuidarse todo el año: evitar la exposición al sol entre las 10 y 16, utilizar protector solar mayor a 30 FPS, aplicándolo media hora antes de la exposición solar y renovándolo si la piel se moja, y evitar las radiaciones generadas por las camas solares.
Además, es fundamental realizarse el autoexamen de la piel preferentemente una vez al mes, y visitar al dermatólogo en forma periódica.
Por otra parte se debe prestar atención a si sale algún lunar nuevo o alguno comienza a picar o sangrar también marcan la diferencia a la hora de detectar la enfermedad a tiempo.
Sumado a esto, se menciona que la adopción de hábitos saludables reduce hasta un 40% las posibilidades de contraer cualquier tipo de cáncer. Entre estos hábitos podemos mencionar llevar una alimentación saludable incorporando frutas, verduras y cereales a la dieta regular; evitar el exceso de peso; realizar actividad física regularmente; no fumar y consumir alcohol responsablemente.