El Ministerio de Desarrollo Social, a través de la Subsecretaría de Niñez, Adolescencia y Familia, implementa desde 2020 el programa Mirame, destinado a la contención y la promoción de derechos para personas en situación de calle. En primera instancia las tareas se centraron en la identificación de la población objetivo y su invitación a los dispositivos institucionales. De esta manera se busca generar las condiciones y accesos a espacios educativos formales, formación en oficios, y derechos a la identidad y a la atención salud.
Para ello se potenció el trabajo interdisciplinario con otras áreas del Estado provincial y el establecimiento de redes de trabajo para abordar las problemáticas de situación de calle, la pobreza, la marginación y los consumos problemáticos y trabajando en el posicionamiento del programa en la sociedad.
Avances
En estos años, se ampliaron tanto los recursos humanos como los espacios institucionales para la atención. Así, se pasó de una institución solamente para pernoctar, a tres centros de contención convivenciales en el Gran Resistencia y a un parador nocturno.
Las cifras también son alentadoras en el segmento de tres años que se midieron, atravesados por la pandemia que incrementó la informalidad laboral y el desempleo. En este tiempo, siempre en el área metropolitana, se redujeron en el 50% las personas en situación de calle.
La población siempre es oscilante y las razones están atadas a una serie de condiciones. Existen muchos casos en los que se trata de gente que está en el Chaco de tránsito por un período de tiempo determinado y las condiciones meteorológicas en época invernal el número crece, pero se cuenta con suficientes plazas para cubrir el aumento de la demanda.
Se trabaja diariamente en los dispositivos la posibilidad de revinculación familiar, la independencia, autonomía y autosuficiencia de las personas y el desafío es mejorar los porcentajes de revinculaciones familiares y disminuir la reincidencia para el ingreso.
Voluntariedad
Todo el trabajo tiene como punto de partida la voluntariedad de quien está en extrema vulnerabilidad, para quienes a pesar de la tarea diaria de las y los operadores en terreno de marcarle los beneficios de no pernoctar en la vía pública, hay quienes eligen permanecer en la calle. Estas personas reciben de forma diaria viandas de desayuno y cena a lo que se agregan abrigos y frazadas en épocas de bajas temperaturas.
Recursos
Las tareas se dan no solo a partir de las recorridas diarias sino también con los aportes que pueda efectuar la ciudadanía para advertir casos de mendicidad llamando al 0800-888-6472.
Durante el invierno realizan los operativos Noches Sin Frío, para difundir entre esta población que existen plazas en el parador nocturno que funciona en avenida 25 de Mayo 835. Allí, como su nombre lo indica, está pensado para que la persona pernocte y regrese al otro día si precisara el espacio.
La otra variable son los centros de alojamiento transitorio de convivencia, en Resistencia son: Mirame 1 (Formosa al 634), Mirame 2 (Fortín Alvarado 336), Mirame 3 (Santa Fe 461), contando con habitaciones específicas para la comunidad LGBTQ+, también dormitorios especiales para familias de manera que no se separen sus miembros y salas específicas para bebés. Excepcionalmente se suman los dispositivos como los hogares Madre Teresa de Calcuta y el de Tránsito para Mujeres Víctimas de Violencia, más sus hijas e hijos.