Fueron detenidos en Bolivia. Ambas personas fueron trasladadas a dependencias de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico, donde serán indagadas. La sospecha de la Justicia argentina es que la droga pertenece a una banda transnacional que trafica a Europa.
Hallaron el GPS de la narcoavioneta estrellada en Chaco. En la zona los gendarmes ampliaron rastrillajes con reconocimientos aéreo del terreno usando drones. En una construcción abandonada localizaron una mochila con pertenencias de pilotos, a dos kilómetros.
El dispositivo fue encontrado al avanzar con nuevas medidas judiciales donde personal técnico procedió al desarmado de la aeronave, para trasladarla a la Escuela Aeronáutica 32 de la ciudad de Resistencia.
El 19 de julio se estrelló una avioneta con un cargamento de cocaína. A la semana siguiente, mientras realizaban rastrillaje por la zona, Gendarmería encontró 32 kilos de la droga dentro de un bulto perteneciente al mismo cargamento.
El sábado, a raíz de estos sucesos, el Juzgado Federal 1 de Resistencia a cargo de la Dra. Zunilda Niremperger y de la Fiscalía Federal Patricio Sabadini, ordenó que se realicen inspección ocular y rastrillaje general.
Como resultado de estas medidas y mientras desarmaban la aeronave estrellada para luego trasladarla a la Escuela Aeronáutica N° 32 de Resistencia, los efectivos del Escuadrón 1 “Sáenz Peña” junto a otras Unidades de la Fuerza ubicaron a kilómetros del lugar, en una precaria construcción abandonada, una mochila que contenía un GPS, un tacómetro óptico digital aparato usado para determinar con precisión la velocidad rotatoria (RPM) usando un haz de luz visible en motores, junto a otros elementos de interés para la causa.
En presencia de testigos, se inspeccionaron los elementos dentro de la mochila y se efectuó el secuestro.
Detenidos
El propietario y el piloto de la avioneta con patente boliviana que el 19 de julio pasado apareció estrellada con más de 300 kilos de cocaína en la localidad chaqueña de Avia Terai, fueron detenidos en el departamento de Santa Cruz, Bolivia, informaron fuentes judiciales.
El fiscal Departamental de Santa Cruz, Roger Mariaca, informó que la policía boliviana ejecutó dos órdenes de aprehensión emitidas por el Ministerio Público en contra de Veymar E. V. M. y Nilo L. T. -dueño y piloto de la avioneta, respectivamente-, ambos acusados del delito de «tráfico de sustancias controladas», en este caso a Argentina. Están acusados de “tráfico de sustancias controladas”.
La caída de la aeronave ocurrió alrededor de las 16 del 18 de julio último, a 5 kilómetros del establecimiento rural conocido como «La Aurora»
«El Ministerio Publicó inició las investigaciones de oficio para dar con todos los involucrados, se colectaron diferentes elementos, como documentos que comprueban que uno de los sujetos sería el propietario de la aeronave y documentación que acredita que la otra persona sería el piloto», explicó Mariaca.
Ambas personas fueron aprehendidas y trasladadas a dependencias de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN), donde serán indagadas y quedarán a disposición de un juez cautelar.
La caída de la aeronave ocurrió en la siesta del 19 de julio, a 5 kilómetros del establecimiento rural conocido como «La Aurora», en Avia Terai, Departamento Independencia, y de la ruta nacional 16, en cercanías de una escuela primaria y a unos 200 kilómetros de la ciudad de Resistencia.
Fuentes judiciales informaron que la avioneta cayó entre un camino rural y un campo posiblemente cuando realizaba un vuelo rasante para arrojar los bultos de cocaína en forma de «bombardeo», una de las maniobras más frecuentes utilizadas en esa zona.
Los lugareños alertaron a la comisaría de Concepción del Bermejo cerca de las 15.45, por lo que de inmediato se trasladaron al lugar.
Sin embargo, al llegar, los efectivos descubrieron que no se hallaban personas heridas ni fallecidas y encontraron la aeronave volcada, con la carga de 10 panes rectangulares de color verde con un logo identificatorio de una mano abierta y un rostro con barba, que en su interior contenían un total de 324,500 kilos de cocaína, los cuales quedaron a disposición de la justicia federal.
Testigos presenciales aseguraron a los investigadores que dos personas con aparentes lesiones fueron rescatadas y trasladadas en una camioneta tras la caída de la avioneta
Testigos presenciales aseguraron a los investigadores que dos personas con aparentes lesiones fueron rescatadas y trasladadas en una camioneta tras la caída de la avioneta.
En tanto, el pasado martes, una semana después del hallazgo de la avioneta estrellada, efectivos de Gendarmería Nacional (GNA) encontraron bultos con otros 32 kilos de cocaína a unos 60 metros del lugar donde había caído la aeronave, que se presume formaban parte del mismo cargamento, dijeron voceros de esa fuerza de seguridad.
De la pesquisa realizada en Bolivia surgió que la avioneta Cessna 210, Turbo Centurion II, con matrícula boliviana CP-3123 de color roja y blanca había sido secuestrada hace dos meses en ese país, en el marco de una investigación narco, aunque al no encontrar rastros de drogas tras una serie de peritajes, la Justicia se la entregó nuevamente a su dueño.
La sospecha de la Policía y la Justicia argentina es que la droga pertenece a una banda transnacional que opera desde hace al menos dos años la ruta Bolivia-Paraguay-Argentina para transportar la cocaína que, luego, trafica a Europa vía marítima a través de la hidrovía en Rosario y San Lorenzo, entre otras.
El director general de Consumos Problemáticos de la Policía de Chaco, el comisario general Juan Ramón Duarte, planteó la posibilidad de que el caso del aeroplano esté relacionado con “la causa que se está llevando adelante junto a Gendarmería Nacional desde el año pasado”, en referencia a las investigaciones de la ruta que trazó una banda narcocriminal entre los territorios de Bolivia, Paraguay y Argentina, para después exportar la droga hacia Europa.
El detalle que se transformó en una de las claves para relacionar los casos fueron unas imágenes encontradas en los paquetes decomisados por los efectivos chaqueños, ya que los investigadores precisaron que las fotografías mostraban una mano abierta y la cara de un hombre con barba.
“No es la primera vez que se secuestran panes de cocaína con esas imágenes en el frente”, reveló un investigador durante una entrevista para Télam tras explicar que el uso de fotos a modo de etiqueta sería un método dentro del crimen organizado para poder clasificar qué tipo de droga se encontraría en el interior de cada ladrillo y la calidad de la misma.