En la sesión del pasado miércoles 30, la Cámara de Diputados de la provincia, con 28 votos positivos, sancionó la Ley 3891 de promoción audiovisual, la cual dispone que el Estado chaqueño apoye, promueva y fomente la creación y producción de obras audiovisuales, su difusión y conservación como patrimonio sociocultural.
Impulsada por el Ejecutivo chaqueño, fue celebrada con gran entusiasmo por realizadores independientes del sector audiovisual, como así también por docentes y alumnos de carreras afines al lenguaje.
Desde el Instituto de Cultura del Chaco, impulsor del proyecto, celebraron la creación de la Ley 3891 del Audiovisual Chaqueño. El proyecto de la nueva ley se trabajó de manera mancomunada con realizadores y productores audiovisuales de la provincia desde marzo de 2022, fecha en que se realizó el Primer Congreso Audiovisual del Chaco. Contó con el acompañamiento del Instituto de Cultura de la provincia, entidad que motorizó las distintas instancias de elaboración del documento para la evaluación del Poder Ejecutivo y posterior presentación en el Legislativo.
Allí fue impulsado por los diputados del bloque justicialista Mariela Quirós, presidenta de la Comisión de Cultura, Educación y Biblioteca Legislativa; Roberto Acosta, presidente de la Comisión de Industria, Comercio y Defensa del Consumidor; Hugo Sager y Nicolás Slimel, presidente e integrante de la Comisión de Hacienda y Presupuesto, respectivamente.
Desde el Instituto de Cultura señalaron que la nueva normativa viene a subsanar reclamos históricos del sector, sobre todo en lo que tiene que ver a la asignación permanente de recursos del Estado para la promoción de la producción audiovisual de la provincia con criterios de equidad de género y en clave de diversidad cultural, además de la protección de las y los trabajadores locales para asegurar su profesionalización y propiciar la expansión de la industria en todo el territorio.
En el día de
la cultura
El presidente del Instituto de Cultura del Chaco, Francisco Romero, expresó: «En un día extraordinario donde podemos vincular la memoria con el presente, ya que es el Día de la Cultura del Chaco, la sanción de esta ley significa que a partir de hoy vamos a ejercer el derecho de que chaqueñas y chaqueños narren las historias del Chaco con actrices, actores, técnicas y técnicos, porque el derecho a la narración identitaria es importante, sobre todo si hablamos de una industria audiovisual».
En el mismo sentido, la diputada Mariel Quirós destacó que «desde la Legislatura nos planteamos impulsar esta ley, propuesta por el gobernador Jorge Capitanich, a través del cual el Estado chaqueño apoya, promueve y fomenta la creación y producción de obras audiovisuales, su difusión y conservación como patrimonio sociocultural. Vimos gestarse y crecer este proyecto, lo acompañamos sabiendo que tenemos un programa para incentivar y fortalecer a todas y todos los hacedores culturales del Chaco. Tenemos una provincia con historia y con historias por contar», resaltó.
«Esta ley es parte de un programa político y cultural que busca fortalecer la industria cultural chaqueña», destacó la diputada Quirós, quien valoró además «el espíritu democrático de la ley, nacida del consenso, de la confluencia entre el gobierno provincial -a través del Instituto de Cultura y los medios públicos- y los realizadores chaqueños que participaron activamente en su diseño».
Repercusiones
Entre sus puntos más destacados, la Ley de Régimen de Promoción del Sector Audiovisual establece la creación de un plan de fomento audiovisual, con participación activa de todas y todos los productores locales, con protagonismo de los pueblos originarios y del sector gremial que nuclea a las trabajadoras y trabajadores del sector.
«Se empieza a cubrir así una asignatura pendiente -aseguró Quirós-, que es la oportunidad de contar con un circuito sólido de distribución y comercialización de nuestras producciones».
En un mismo sentido se pronunció Carolina Sampor, directora de Industrias Culturales del Instituto de Cultura, quien celebró la sanción de la ley porque «va a generar muchas fuentes de trabajo y va a dinamizar la industria audiovisual». «Esto nos habla de un Estado presente, con políticas públicas para todo el sector cultural», aseguró.
Por su parte, Pequi Giménez, trabajadora audiovisualista, destacó «el acompañamiento de las diputadas y diputados que se pusieron al hombro la ley, y el acompañamiento estatal para que hoy las y los audiovisualistas tengamos nuestra ley».
«Se trata, también, de poner en valor nuestras historias y nuestras maneras de contar esas historias», señaló Quirós. La diputada celebró además «el compromiso del sector audiovisualista, que plantearon desde un primer momento la necesidad y el deseo de que en el Chaco se mire también cine chaqueño, se disfrute de producciones que hablan de nuestra provincia, de nuestras identidades, de quiénes somos».
«La ley supone más espacios para las producciones chaqueñas, mejores circuitos de distribución, propone la creación de un archivo audiovisual que preservará y recopilará las obras de nuestros realizadores», especificó Quirós.
La Ley de Promoción Audiovisual también propone la creación de un Registro Provincial Audiovisual, en el que se puedan inscribir tanto personas físicas como jurídicas que realicen actividad en la provincia.
«Esta ley es parte de un proyecto político, de una planificación, que pone a la cultura del Chaco como referencia regional», aseguró la diputada.
Rasgos sobresalientes
de la Ley
El objetivo manifiesto es asegurar políticas de fondeo y financiamiento permanentes que aseguren previsión a largo plazo de diversos mecanismos de fomento para el desarrollo de una industria audiovisual chaqueña de calidad, sustentable y generadora de recursos para la provincia, desde la concepción hasta la comercialización de sus producciones. Asimismo, formar una audiencia con fuerte autoestima del patrimonio artístico chaqueño, para que desde las pantallas y plataformas locales puedan verse representadas sus historias, sus múltiples orígenes, sus tragedias y esperanzas, sus rostros y paisajes.
Con esta normativa se asegura, por un lado, un financiamiento autónomo por fuera del Instituto de Cultura del Chaco con un presupuesto de $250 millones -ajustado a inflación- para 2024. En segundo lugar, las decisiones de la planificación y del plan de fomento anual, se definirán en un consejo del audiovisual chaqueño, integrado por un coordinador o representante del Instituto de Cultura y por ocho representantes del sector audiovisual, con capilaridad territorial por regiones y representantes de los pueblos indígenas, de esta manera la centralidad y el protagonismo en la toma de decisiones lo tendrán el sector audiovisual independiente chaqueño. Y por último, se propicia la jerarquización para discutir anualmente el qué, el cómo y el para qué del plan de fomento durante el Congreso de Arte y Cine Audiovisual del Chaco, que tendrá una frecuencia de una vez por año.