-Este viernes, y con celebración el sábado en La Casa Martínez, en Corrientes, usted compartirá nuevamente escenario con invitados de toda la región.
-Sí, como bien decís, no solamente es un recital de Pelo, Blues y Amigos, sino también voy a darme el gusto de festejar mi cumpleaños en este evento, junto con amigos.
Tengo amigos invitados para acompañarme y estamos tratando de hacer un recorrido por nuestros temas, presentando nuevos temas, que es algo que también los músicos queremos variar de vez en cuando en nuestro repertorio. O sea, haremos los viejos, pero también algunos temas nuevos que vamos a estar representando y mezclándolos con algunos clásicos del blues argentino.
Vamos a estar en La Casa Martínez y es una linda oportunidad; creo que es la tercera vez ya que tocamos en Casa Martínez. Bueno, sí, ya se están acostumbrando a ir a verte en esa tu casa, una casa que cada tanto tiene el gusto de poder tenerte allí con toda la banda.
-¿Con qué se queda de todo esto que vivió hasta hoy llevando el blues sobre su espalda?
-Son muchas cosas, son más de 40 años de estar haciendo este género en la región, de haberlo llevado, haber tocado en España, en Cuba, en Brasil, en el Paraguay, y tener la posibilidad de tocar también con esos músicos que yo escuchaba cuando era chico y que yo los tenía allá lejos y para mí eran mis héroes.
Y de repente tener la posibilidad de tocar con ellos, de estar con ellos, de conversar con ellos. O sea, son muchas las anécdotas. Me quiero quedar con una experiencia muy linda que tuvimos en Tecnópolis hace exactamente 10 años con el amigo Tony Salazar y el amigo Seba Ibarra, cuando fuimos a actuar en Tecnópolis, invitados por la organización de ese año, y tocamos previo al espectáculo de Litto Nebbia en el escenario.
También haber llenado el Teatro O’Gara con Claudio Gavis, el guitarrista de Manal, y ser parte de la banda de él con la que recorrimos el Nordeste.
COMO LA PRIMERA VEZ
-Si bien la humildad es algo que lo caracteriza, todos los grandes tocaron de alguna manera con usted y compartieron el escenario.
-Y más allá de eso, me siento igual, pero con un poco más de experiencia. Igual en el sentido de que cada vez que uno se va a presentar está nervioso, no sabe si va a salir, no sabe cómo va a estar uno.
Espera que todo esté bien, que los que lo acompañan también estén bien, que todos disfrutemos, que el público se vaya contento.
Entonces, esa inseguridad ante lo que va a pasar es muy linda. La adrenalina que se secreta en ese momento previo a un espectáculo es la misma; por suerte, no es algo que uno ya lo tiene mecanizado, sino que cada evento es uno nuevo. Agradezco si alguien en algún momento me invita, puedo tener la oportunidad.
ARTE Y REALIDAD
-Como músico, sobre el escenario siempre buscan su voz como referencia dentro del género y siempre tener un invitado. ¿Cómo vive esa situación? ¿Cómo siente la música al momento de crearla?
-El arte es abrirse, abrirse y poder sacar lo mejor de uno, pero también el hecho de aprender constantemente. Uno aprende de los demás, y los demás también quizás aprenden algo de uno. Nutrirse de otras personas, de otros artistas, de artistas que hacen cosas diferentes a las de uno, es muy bueno.
Por eso siempre trato de invitar a viejos compañeros de grupo, para ver también qué traen ellos. Aparte, sé que siempre trato de rodearme de buenos artistas, entonces quiero disfrutar de su arte y enriquecer el mío. O sea, lo que yo pueda dar siempre, por supuesto. Por ejemplo, cuando uno hace un tema, el tema me pertenece, pero muchas veces nos olvidamos de decir que las riquezas en arreglos y todo le pertenecen quizás a un músico que se acercó y dijo: «¿Por qué no le hacemos esto ahí en tal parte?». Eso queda bueno, eso enriquece, eso le da mayor valor a la obra. Y sí, la poesía es importante siempre en mi vida.
Por eso, también en cierto momento, ahora estoy un poco dejado al respecto, pero siempre cubro momentos de mi vida importantes, sigo leyendo, sigo escribiendo algo. No me estoy dedicando tanto, sobre todo después del deceso de mi amigo, no es que sentí muchas ganas de crear por ese lado, pero van saliendo cosas, por más que uno no quiera, salen, aparecen cosas.
-¿A qué le canta? ¿A qué le escribe?
-Le canto a las cosas que me pasan, a lo que siento. Trato principalmente de expresar lo que pienso, no solamente contando cosas mías. Muchas de ellas no son cosas mías, pero son cosas que veo y cosas que quiero que sucedan.