La situación salarial de los trabajadores docentes y no docentes de las universidades públicas argentinas ha alcanzado un punto crítico, según un informe reciente difundido por el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN).
Este documento, elaborado por las Universidades Nacionales de Río Negro y de San Martín, expone una realidad preocupante: más del 85% de los docentes y el 60% de los no docentes perciben salarios que se encuentran por debajo de la línea de pobreza.
Un Informe que Desnuda la Crisis
Los datos presentados en el informe son contundentes. En julio de 2024, el 92% de los docentes universitarios sin antigüedad cobraban salarios inferiores a la línea de pobreza.
Esta situación no mejora mucho con la antigüedad: el 87% de los docentes con 10 años de antigüedad se encontraba en la misma situación. Entre los no docentes, el 79% de aquellos sin antigüedad y el 63% con 10 años de experiencia laboral también perciben ingresos insuficientes para cubrir las necesidades básicas.
Asimismo, estos números reflejan una caída del poder adquisitivo que se ha venido agravando en los últimos meses. Desde el comienzo del año, los trabajadores de las universidades han perdido más de un cuarto de su poder adquisitivo real.
Este deterioro salarial es aún más preocupante si se compara con la inflación acumulada entre diciembre de 2023 y abril de 2024, que fue del 114,5 %.
Protestas y Reclamos en el País
La situación salarial generó un profundo malestar entre los trabajadores universitarios, que se ha traducido en una serie de protestas y paros a lo largo del año. En abril, la Marcha Federal Universitaria convocó a 1 millón de personas en todo el país, exigiendo una recomposición salarial y la actualización de los presupuestos universitarios.
A pesar de las promesas del Gobierno de actualizar los gastos de funcionamiento de las universidades, la cuestión salarial sigue sin resolverse.
Durante agosto, la tensión se incrementó con dos paros nacionales universitarios, realizados el 12, 20 y 21, sin que se obtuvieran respuestas concretas por parte del Gobierno.
En este contexto, el Consejo Interuniversitario Nacional reiteró su profunda preocupación y solicitó la urgente sanción y promulgación de la Ley de Financiamiento Universitario.
Comparativa Internacional
Otro aspecto alarmante del informe es la comparativa internacional. A pesar de que el sistema universitario argentino está entre los mejores de América latina en términos de calidad académica, investigación e innovación, los docentes universitarios argentinos son los peor pagos de la región.
Un docente titular con dedicación exclusiva gana en la Argentina un promedio de USD1124 al mes, mientras que en Brasil su par recibe USD4.231. Incluso países como Uruguay, México y Perú ofrecen mejores remuneraciones a sus docentes universitarios.
La Brecha Salarial y la Crisis
La brecha entre los aumentos salariales y la inflación es otro de los puntos críticos destacados en el informe. Con una inflación que superó el 114% en el primer semestre del año, los aumentos salariales acordados en 2023 (9% para noviembre, 6% para diciembre y 10 % para febrero de 2024) resultaron insuficientes.
Esto ha dejado a más del 85% de los trabajadores universitarios por debajo de la línea de pobreza, una situación insostenible que ha motivado los reclamos y las movilizaciones en todo el país.
El informe también señala que, en comparación con otros sectores productivos (privado, estatal y no registrado), la pérdida salarial de los trabajadores universitarios es la más amplia de todas, con una brecha del 66,5% entre los índices de inflación y los aumentos salariales acumulados.
El informe subraya que «todos los problemas que tenemos se resuelven con más educación y universidad pública, con más inversión en ciencia y tecnología». La educación, afirman los integrantes del CIN, es el camino para desandar las desigualdades estructurales de la Argentina y emprender una senda de desarrollo y soberanía.
Un Llamado
a la Acción
La crisis salarial en las universidades no solo afecta a los trabajadores, sino también a la calidad educativa y al futuro del país.
«Convocamos a la sociedad argentina a defender la educación pública», concluye el informe del CIN, que advierte sobre los peligros de continuar con el deterioro salarial y el desfinanciamiento de las universidades.
El sistema universitario público argentino, considerado uno de los pilares fundamentales para el desarrollo y la equidad en el país, atraviesa una de sus crisis más profundas.
Las próximas semanas serán decisivas para definir si el Gobierno responde a las demandas salariales y de financiamiento, o si la brecha entre la inflación y los salarios sigue aumentando, con consecuencias graves para la educación superior en la Argentina.