Hoy será un día clave para la comunidad universitaria en Argentina cuando miles de estudiantes, docentes y gremios salgan a las calles de todo el país en una nueva Marcha Federal Universitaria, con el objetivo de rechazar el veto anunciado por el presidente Javier Milei a la Ley de Financiamiento Universitario, aprobada el pasado 12 de septiembre por el Congreso.
Si bien la concentración principal se realizará en la Plaza del Congreso en Buenos Aires, no obstante la protesta se replicará en todo el país.
En el caso de Resistencia y Corrientes, protagonizarán una marcha conjunta. A las 14:30, las columnas saldrán desde el Campus de la UNNE en Resistencia, mientras que en Corrientes la concentración será en el Parque Mitre. Ambas columnas se encontrarán en la costanera correntina, desde donde avanzaron hacia el Rectorado de la UNNE lugar en el que se realizará un abrazo simbólico y la lectura de un documento conjunto.
El texto, elaborado por autoridades universitarias, sindicatos docentes y representantes estudiantiles, hará hincapié en los puntos más urgentes del reclamo: la necesidad de un presupuesto adecuado para las universidades, la actualización salarial de docentes y no docentes, y el rechazo a las políticas de ajuste que afectan al sistema educativo.
Intensificar la lucha
La secretaria general de la Asociación de Docentes e Investigadores de la UNNE (ADIUNNE), Marina Stein, expresó su preocupación por la posible concreción del veto a la Ley de Financiamiento Universitario. En declaraciones a medios locales, Stein afirmó que “ si el Gobierno decide vetar la ley, la lucha se intensificará”.
Stein también señaló que los aumentos salariales otorgados hasta el momento por el Gobierno no han sido suficientes y, en muchos casos, han sido decididos de manera unilateral, sin respetar los mecanismos de negociación colectiva. “Estamos ante una crisis profunda, y la única salida es que se respete el financiamiento que las universidades necesitan para funcionar y para garantizar los derechos de sus trabajadores”, agregó.
Mientras que el rector de la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE), Omar Gerardo Larroza, destacó que esta movilización busca visibilizar la problemática de forma contundente. “El reclamo por el financiamiento universitario no solo es un pedido económico, es una demanda por el futuro del país, por la calidad de la educación pública”, aseguró
Larroza subrayó la importancia de que toda la comunidad universitaria se sume a esta nueva jornada de lucha. “Debemos seguir levantando la voz hasta obtener una respuesta clara que garantice el funcionamiento y la dignidad del sistema educativo”, agregó.
documento del Cin
El documento “Para seguir siendo una Nación. Sí al financiamiento universitario”, aprobado por el Comité Ejecutivo del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), y al que adhirió la UNNE, renovó el reclamo por la profundización del desfinanciamiento y la desjerarquización del sistema científico y universitario
En el mismo se expresó la preocupación ante la falta de respuesta del Gobierno Nacional luego del éxito de la movilización del 23 de abril pasado, donde miles de personas marcharon en defensa del sistema universitario.
El documento del CIN señaló que, pese a los reiterados intentos de diálogo con las autoridades nacionales, no se han logrado avances concretos. “Desde principios de año, advertimos las dificultades que el sistema universitario atravesaba. Lo hicimos razonablemente, pero con firmeza, mientras soportamos una campaña injusta y falaz que busca desprestigiar lo que sucede en el ámbito universitario”.
Las autoridades universitarias aseguraron que se han puesto “a disposición de las autoridades nacionales para la búsqueda de soluciones y advertimos las dificultades que el sistema universitario atravesaba”, pero que “no ha habido, ni siquiera, vocación de diálogo”
Se destina párrafo especial a la Ley de Financiamiento Universitario, asegurando que su aprobación en el Congreso “abrió una esperanza”, para sostener el sistema en el presente año, “otorgando previsibilidad en materia presupuestaria y una respuesta a la angustiante situación salarial”. Al tiempo que consideraron que “se trata de una ley responsable que resuelve los problemas de manera razonable porque evita comprometer fiscalmente al Estado. A pesar de saberlo fehacientemente, el Gobierno manifestó que optaría por vetarla”, alertaron.
Sobre la cuestión presupuestaria, se advierte que al mismo tiempo que se amenaza con el veto, se eleva al Congreso un proyecto de presupuesto para el 2025 que agrava aún más la situación, ya que nunca antes los fondos solicitados por el CIN estuvieron a tanta distancia de lo que el Gobierno propuso al Congreso para su tratamiento.
Así, se pide al Presidente de la Nación que no prospere con el veto a la Ley de Financiamiento Universitario 2024 y reconsidere el proyecto de presupuesto para el 2025.
“A la sociedad argentina, que supo construir a lo largo de la historia un sistema universitario reconocido en el mundo por su excelencia, que acompañó con extraordinarias movilizaciones cada vez que la historia llamó a su puerta, nuestro sincero agradecimiento, y nuestra invitación a que lo hagamos de nuevo”, concluye el comunicado del CIN al que adhirió la UNNE.
La genesis de un conflicto
El conflicto estalló cuando el presidente Milei manifestó su intención de rechazar la Ley de Financiamiento Universitario, que había sido aprobada en el Senado con un amplio respaldo: 57 votos a favor, 10 en contra y una abstención.
La ley, diseñada para recomponer los salarios de docentes y no docentes, y para garantizar los recursos para el funcionamiento de las universidades, generaría un impacto presupuestario estimado en $738.595 millones, equivalentes al 0,14% del Producto Bruto Interno (PBI).
«La ley es fundamental no solo para los docentes y estudiantes, sino para el futuro del país. La educación pública es el pilar de una nación soberana», destacó Francisca Staiti, secretaria general de CONADU Histórica quien también recordó que la movilización de hoy se enmarca en una serie de protestas iniciadas a principios de semana, con paros nacionales y acciones de visibilización.
la comunidad educativa
La marcha cuenta además con un fuerte respaldo de los gremios docentes y no docentes, pero además del apoyo de la Confederación General del Trabajo (CGT) y la CTERA. Sonia Alesso, secretaria general de CTERA, explicó que la medida de fuerza busca también garantizar el derecho de los trabajadores de la educación a salarios dignos y a un sistema educativo sólido. «El veto a la ley es un ataque directo a la educación pública y al futuro del país. Vamos a seguir en la calle hasta que Milei escuche nuestras demandas», afirmó Alesso durante la conferencia de prensa previa a la movilización.
Mientras se espera la decisión final del presidente Milei, que tiene hasta el 3 de octubre para concretar el veto, la incertidumbre en las universidades sigue creciendo. En caso de que se oficialice el veto, los gremios ya han anunciado nuevas medidas de fuerza, que podrían incluir paros indefinidos y una profundización de las protestas.
«Si el presidente decide vetar la ley, la lucha no terminará aquí. Vamos a seguir defendiendo la universidad pública y gratuita con todas nuestras fuerzas», sentenció Francisca Staiti de CONADU Histórica.
El futuro del sistema universitario argentino pende de un hilo, y la movilización de hoy dejó claro que la comunidad educativa no está dispuesta a retroceder en sus derechos. «Defender la educación es defender el país», concluyó Staiti, resumiendo el sentir de miles de manifestantes que salieron a las calles en todo el país en defensa de las universidades públicas.