El legislador nacional de Juntos por el Cambio (JxC), Juan Carlos Polini, se manifestó en contra del reciente veto del gobierno de Javier Milei a la Ley de Financiamiento Universitario.
Comparó su labor en la Cámara de Diputados con la de un trabajador portuario, destacando la intensidad de su trabajo: «Un cargador en el puerto trabaja mucho más que nosotros, aunque no fue tanto, sí fue intenso en cuanto a las presiones», afirmó.
El legislador chaqueño se refirió a la situación actual de su bloque en el Congreso, donde las diferencias internas están a la orden del día. Habló sobre el liderazgo de Rodrigo de Loredo, presidente del bloque, quien ha intentado manejar las tensiones «con pinzas».
En declaraciones a Radio Natagalá, Polini advirtió que los recientes acontecimientos han llevado a una «posición de inflexión», revelando tensiones internas que han surgido por compromisos de algunos legisladores con gobernadores alineados al gobierno nacional.
«Es lamentable que algunos compañeros de bloque terminen votando en sintonía con los actos del Gobierno», dijo Polini, destacando la necesidad de una postura unificada.
Crítica al veto
El legislador Polini calificó como «un grave error» el veto a la Ley de Financiamiento Universitario. «Este veto afecta directamente a las universidades públicas y a los estudiantes de clases medias y bajas, quienes dependen del financiamiento estatal», explicó.
En otra parte, sostuvo que la decisión del Gobierno desvirtúa la discusión sobre la educación superior y justifica su postura en una supuesta falta de trabajo del Estado en la gestión de estos recursos.
«El veto ha dejado a miles de estudiantes desamparados», alertó. «Estamos hablando de un presupuesto que se ha reducido drásticamente, lo que impacta en la calidad educativa y limita las oportunidades de formación para muchos jóvenes», dijo.
Asimismo, enfatizó que la educación no debería ser un sacrificio en tiempos de crisis económica: «No se puede permitir que el futuro de nuestros estudiantes esté en riesgo por decisiones políticas erradas».
También reflexionó sobre el liderazgo dentro de JxC. «No estoy abogando por un cambio drástico, pero sí creo que necesitamos mayor claridad y cohesión a la hora de votar en el Congreso», aseguró.
Este llamado a la unidad es crucial en un momento donde las diferencias internas podrían desdibujar la identidad del bloque.
«Cuando hay presiones externas, no podemos permitir que cuatro o cinco legisladores definan la votación sin consultar al resto del bloque», comentó Polini, dejando claro que busca una estrategia que garantice una voz unificada en el Congreso.
Al profundizar en las consecuencias del veto, Polini destacó que la pérdida de la ley de financiamiento no es solo económica. «Esto es un retroceso en nuestras políticas educativas. La ley estaba diseñada para recuperar el financiamiento que las universidades necesitan para operar efectivamente», explicó.
«La situación actual es similar a lo que ocurrió con los jubilados, donde un desfasaje económico afectó a los más vulnerables», reflexionó. «No se puede culpar a los estudiantes por una mala gestión», subrayó.
«Este veto representa un golpe directo a la educación pública», insistió, reiterando que el financiamiento debe ser una prioridad para cualquier gobierno que pretenda construir un futuro sólido para el país.
La perspectiva sobre el Gobierno Nacional
Consultado acerca de que si se siente desilusionado con el accionar del Gobierno, Polini respondió sin titubeos: «No espero otra cosa. Ojalá que al Gobierno le vaya muy bien, pero no comparto su estrategia». Conocedor de las dinámicas políticas, Polini afirma que su postura se basa en la experiencia y en la observación de cómo se han manejado las cosas hasta ahora.
«Mi experiencia con Javier Milei me ha permitido formarme una opinión clara. No me sorprende lo que están haciendo, y aunque estoy dispuesto a apoyar medidas que considero positivas, no dudaré en criticar aquellas que perjudiquen a la ciudadanía», afirmó con determinación.
El futuro
de la UCR
Polini también se mostró preocupado por el futuro de la Unión Cívica Radical (UCR), un partido que ha vivido momentos difíciles y que ha tenido que redefinir su identidad. «Estamos en un proceso de reconstrucción.
No podemos perder de vista la defensa de la educación pública, que es un pilar fundamental de nuestra propuesta», destacó.
Finalmente Polini se mostró optimista sobre la posibilidad de construir una alternativa política sólida a nivel nacional. «Aunque el camino será lento, es necesario trabajar en ello. La UCR tiene un papel importante que desempeñar en el futuro político del país», concluyó.