El conflicto en las universidades nacionales continúa escalando. Desde el lunes 21 de octubre, las actividades académicas se paralizaron en el marco de una nueva medida de fuerza convocada por CONADU Histórica, la federación que agrupa a docentes universitarios. El paro, que se extenderá hasta el sábado 26 de octubre, tiene como objetivo reclamar mejoras salariales, aumento del presupuesto universitario y la restitución del Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID).
A lo largo de esta semana, tanto docentes como no docentes y alumnos se movilizaron con actividades de visibilización en las principales casas de estudio del país, incluyendo la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE). Los reclamos se centran en la falta de respuestas por parte del gobierno nacional ante la grave crisis financiera que atraviesan las universidades.
línea de indigencia
Uno de los datos más alarmantes fue dado a conocer por la Asociación de Docentes e Investigadores de la UNNE (ADIUNNE). Según un informe reciente, el 85% de los docentes de la universidad percibe salarios que no alcanzan a cubrir las necesidades básicas de sus familias, quedando por debajo de la línea de indigencia. «Es insostenible seguir trabajando en estas condiciones. Pedimos una recomposición salarial urgente y la actualización de la garantía salarial», señaló Marina Stein, secretaria general de ADIUNNE y docente de biología, en una conferencia de prensa realizada el pasado viernes.
Stein también destacó que la situación presupuestaria no es nueva, pero que el veto presidencial a la Ley de Financiamiento Universitario profundizó la crisis. «El veto de Milei fue un golpe muy duro para la educación pública. No solo afecta a los docentes, sino también al funcionamiento diario de las universidades. Venimos arrastrando una pérdida del 60% en nuestros salarios en relación con la inflación y no vemos respuestas concretas del gobierno», afirmó la dirigente sindical.
Clases públicas y asambleas
Como parte de las actividades de protesta, el lunes se llevaron a cabo varias clases públicas en el campus de la UNNE en Resistencia. A las 9:30, la clase titulada «Luchas sociales en la antigüedad» reunió a estudiantes y profesores en una mesa de discusión que abordó cómo los movimientos sociales han sido una constante a lo largo de la historia.
Posteriormente, a las 11:00, se desarrolló la clase pública «Del sujeto político como voz», donde se discutieron las implicancias de la participación política en contextos de crisis económica. A las 15:00, los docentes ofrecieron la clase «Presupuesto universitario en silogismos hipotéticos», una reflexión crítica sobre el manejo de los fondos en las universidades.
Finalmente, la jornada del lunes concluyó con una asamblea estudiantil a las 16:00 y una asamblea interclaustros a las 18:00, en la que se debatieron posibles nuevas acciones de lucha en caso de que el conflicto no se resuelva.
defender la
educación pública
Los docentes justifican las medidas de fuerza ante la falta de avances en las negociaciones con el gobierno nacional. El conflicto por la recomposición salarial y la demanda de mayor presupuesto lleva más de dos meses. Desde agosto, los gremios universitarios han convocado a varios paros y medidas de fuerza.
Un presupuesto insuficiente
El reclamo de los docentes también está vinculado con la necesidad de un mayor presupuesto para las universidades nacionales. Según el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), las universidades requieren un presupuesto de $7,2 billones para 2025, sin embargo, el proyecto presentado por el gobierno solo contempla $3,8 billones. Esta disparidad ha generado fuertes críticas desde el ámbito universitario.
El paro no solo afecta a los docentes, sino también a los estudiantes y trabajadores no docentes, quienes se han sumado a las protestas
El conflicto en las universidades parece lejos de resolverse. Carlos De Feo, secretario general de CONADU, anticipó que, de no haber respuestas favorables por parte del gobierno, las medidas de fuerza continuarán. «Este paro de una semana es solo el principio. Si no hay un compromiso real para solucionar esta crisis, vamos a seguir profundizando las medidas. No descartamos convocar a un paro por tiempo indeterminado», advirtió De Feo.
El jueves 24 de octubre, la Federación de Docentes Universitarios (Fedun) celebrará un congreso extraordinario en el que se definirán las próximas acciones a seguir. Allí se debatirá la posibilidad de convocar a nuevas jornadas de paro o movilizaciones en todo el país.
La educación en peligro
El sentimiento de preocupación por el futuro de la educación pública es compartido por docentes, estudiantes y trabajadores universitarios. «Estamos en una situación crítica. La falta de presupuesto y de una política educativa clara pone en peligro el futuro de la educación pública. No podemos seguir permitiendo estos recortes», concluyó Stein.
A medida que avanza la semana de paro, las actividades de protesta continuarán en las distintas universidades del país. Se espera que el viernes 25 de octubre se realicen abrazos simbólicos en varias facultades y que el sábado 26 se cierre la semana con una movilización masiva en Buenos Aires frente al Congreso Nacional.
La semana de paro en las universidades nacionales pone en evidencia la gravedad de la crisis presupuestaria y salarial que atraviesan las casas de estudio. A pesar de la falta de respuestas por parte del gobierno, los docentes, no docentes y estudiantes continúan firmes en su lucha por una educación pública de calidad. Con clases públicas, asambleas y movilizaciones, buscan visibilizar un conflicto que, de no resolverse, podría tener consecuencias profundas para el futuro del sistema educativo argentino.
El panorama sigue siendo incierto, pero lo que queda claro es que la comunidad universitaria no está dispuesta a ceder en sus reclamos.