La senadora por el Chaco en el bloque Frente Nacional y Popular, María Inés Pilatti Vergara, explicó, entrevistada por Radio Natagalá, que la Constitución habilita la expulsión de legisladores hallados en casos de flagrancia, como el ex senador Edgardo Kueider, quien fue sorprendido intentando pasar dinero no declarado.
Subrayó que el Senado juzga la responsabilidad política, mientras que la Justicia se encarga de la penal, y rechazó que su expulsión fuera una maniobra política para fortalecer algún bloque oficialista, argumentando que sumar un legislador no cambia significativamente el escenario de la oposición.
Por otra parte, calificó 2024 como un año «duro» y acusó al Ejecutivo de trabajar con desprecio por las leyes y la Constitución, en torno a la aplicación de un poder arbitrario que erosiona el sistema democrático.
-Se ha dado esta decisión sobre Kueider.
-La Constitución y la normativa vigente, a ver, nos da la herramienta de la expulsión a modo de sanción extrema hacia la inconducta de un legislador ante el caso de encontrarlo infraganti, o sea, como quien dice en criollo, con las manos en la masa, que es el caso de Kueider.
-Lo que se denomina flagrancia legalmente.
-Exactamente, flagrancia, que no es el caso de Parrilli. Parrilli y otros senadores, porque después sacaron una lista de, no sé, una decena de senadores con causas pendientes o causas en proceso.
Parrilli y los senadores que quieran, que tengan denuncias, causas en proceso, es otra situación. Es la situación por la cual los jueces suelen pedirnos el desafuero de tal o cual legislador. ¿A qué efectos? A los efectos de que ese legislador en alguna instancia del proceso se presente a prestar declaración, que también forma parte de su derecho de defensa.
Posteriormente a la norma constitucional, la ley de fueros se modificó y hoy por hoy ni siquiera es necesario desaforar a un legislador para que preste declaración si es que él decide hacerlo voluntariamente. Como lo hacía Boudou. Todas las veces que lo llamaban a declarar, el tipo iba y declaraba, aun estando en funciones.
Nunca se borró, nunca dejó de asistir a los compromisos institucionales judicialmente hablando. ¿Por qué? Porque según nuestra Constitución, todo ciudadano se presume inocente hasta que se demuestre lo contrario. ¿Cuándo se demuestra lo contrario? Cuando hay sentencia firme. ¿Y cuándo hay sentencia firme? Cuando hay sentencia de la Corte Suprema, la última instancia del proceso judicial, que no ocurre en ninguno de estos procesos.
CONTRABANDO
-¿Y qué pasaría si Kueider finalmente logra conseguir la documentación necesaria respecto de los fondos que él dice que pertenecen a otra persona?
-No importa, porque la Justicia lo que analiza es la responsabilidad penal. Nosotros analizamos la responsabilidad política. O sea, él ante la Justicia puede llegar a un momento y decir que ya no, no era mío.
Objetivamente, más allá de que sea de él o no sea de él, de la secretaria, del hijo, de la madre o del padre, que lo agarraron porque estaba intentando pasar USD200 mil en negro, o sea, sin declarar, es así, sea de él o de quien sea. O sea, el contrabando lo estaba haciendo él.
-Se puede negar estas declaraciones donde aseguran que lo que se apostaba más que nada era a echar a esta persona para poner a una senadora de La Cámpora, de Cristina Fernández de Kirchner.
-Explico una cosa. Nosotros somos 33 legisladores, éramos 37, teníamos quórum propio hasta febrero, marzo del año pasado, cuando Kueider, con Camau Espínola, la senadora de San Luis, y no recuerdo quién más, de Jujuy, decidieron hacer un bloque aparte y se fueron.
De esos 37 quedamos 33. Con 33, si sumamos una, no hacemos ninguna revolución, somos 34. Para tener quórum propio, que es un número con el cual podemos llegar a hacer algo porque podemos autoconvocarnos, por ejemplo, al tener quórum propio, no hacemos nada.
De 33 a 34 no cambiamos nada, o sea, es mentira. Mirá si vamos a hacer todo esto, o vamos a ensuciar, si no fuera cierto el hecho que hemos visto todo con nuestros ojos por la televisión, a un legislador para agregar a una legisladora más. O sea, me parece que no resiste ningún análisis, porque de última, insisto, no nos serviría absolutamente para nada.
Voto de Kueider
-Y en términos políticos, si se quiere investigación judicial, ¿de dónde creen ustedes que sale ese dinero?
-Uno no puede decir eso porque podés presuponer que es parte del pago prometido en aquel momento cuando se fueron de nuestro bloque para votar la ley base, porque el voto de Kueider en la ley base fue decisivo.
O sea, ellos no tenían el número para votar la ley base, y Kueider a nosotros nos había dicho que él se iba a abstener.
Llegado el momento, dio quórum, y cuando se dieron cuenta de que no les alcanzaban los votos para sancionar la ley, Kueider fue el que decidió la votación porque votó afirmativamente, y al votar afirmativamente, empatamos. Y al empatar, se sabe que desempata la presidenta del cuerpo, que en este caso es la de Villarroel. Entonces, no fue un voto más, fue el voto en la oportunidad.
CORRUPCIÓN
-¿Y cuánto vale un voto así?
-No, qué sé yo cuánto vale, la verdad que no sé, porque a mí nunca me pagaron ni una hamburguesa, ¿viste? Así que no, no, ni idea. Pero puede ser, insisto, el origen de esto puede ser el compromiso de una cuota, inclusive de una parte, porque no se olviden de que en su momento también le dieron un cargo para gente que había pedido este senador para una, no sé si era Yacyretá o Salto Grande, una de estas empresas.
O sea, yo no sé cómo se pagan estas cosas, pero indudablemente puede ser por eso, o puede ser también un dinero mal habido de las causas judiciales que tiene pendientes, por las que Arroyo Salgado ahora le pide el desafuero, cosa que nosotros no sabíamos tampoco, por supuesto.
-Claro, saltó todo.
-Cuando uno viene con la conducta torcida, es como que es una maña, no es que se le ocurrió ahora o se tentó de corromperse de la noche a la mañana. Se ve que este chico ya venía corrompido de hace rato.
«Que dejemos lugar a las nuevas generaciones es una obviedad»
-Con respecto a lo que es 2025, en lo que es el PJ, ¿hay renovación o no?
-Sí, hay renovación. Lo que falta es despojo de vanidades y de egos, cosa que siempre aparece en los humanos, ¿no es cierto? Falta más compromiso colectivo y menos orgullo personal. Yo creo que el peronismo es un movimiento muy particular, muy amplio, muy importante, y siempre somos tan maravillosos como jodidos. Y en este caso, después de una derrota que no esperábamos, con estas características, como que estamos en plena ebullición, en plena autocrítica.
Así que creo, apunto y espero que nos pongamos las pilas e insisto en que dejemos los egos de lado. Esto de que dejemos lugar a las nuevas generaciones es una obviedad, porque hay mucha gente en mi generación que ya nos estamos yendo, a ver, yendo de la función pública, no de la militancia, obviamente. Pero no es un problema, porque el peronismo, yo creo, es el partido político que más jóvenes ha incorporado a la representación institucional. No es ese el problema, el problema es otro, ya te digo: es el problema de los egos, de las vanidades y de la necesidad de pensar colectivamente para colectivamente encontrar una propuesta que pueda seducir al electorado.