En la mañana de ayer, los jefes máximos de la Policía del Chaco fueron sometidos a un control toxicológico en la jefatura policial.
Fueron examinados el Jefe de Policía, Comisario General Fernando Javier Romero (foto); el Subjefe, Comisario General Manuel Victoriano Silva y el Director del CEAC, Comisario General Cristian Durand. El control estuvo a cargo de médicos que prestan servicio en el Departamento Medicina Laboral, Comisario General de Policia Leonardo Costa, jefe a cargo accidental del Departamento Medicina Laboral y el Comisario de Policia Alejandro Acosta, Jefe de la Division Toxicología, que cuentan con dispositivo para realizar los test, cuyos resultados se obtienen a los pocos minutos. En este caso, los jefes policiales dieron negativo y también se realizó la misma prueba al personal que presta servicios en Jefatura de Policía.
Estos controles se vienen realizando de manera aleatoria en las diferentes unidades policiales de la zona metropolitana pero también del interior provincial.
EL PROTOCOLO
Los controles son de carácter obligatorioS para los efectivos policiales. En caso de obtenerse resultado positivo, La Policía del Chaco a través de los Departamentos Medicina Laboral y Servicios Sociales, y las Divisiones de las Capellanías Evangélica y Católica respectivamente, realiza el acompañamiento y contención psiquiátrica, psicológica y espiritual al funcionario policial que en forma voluntaria se someta al tratamiento de rehabilitación necesario.
Los agentes implicados también serán investigados conforme a los artículos 98º y 99º del Reglamento del Régimen Disciplinario Policial, que tipifican como faltas graves el consumo de sustancias psicoactivas. En este sentido, se iniciarán los sumarios administrativos correspondientes, con posibles sanciones como la suspensión de funciones y salarios, si corresponde.
La Policía del Chaco, en colaboración con los Departamentos de Medicina Laboral y Servicios Sociales, así como con las Capellanías Evangélica y Católica, ofrecerá asistencia psiquiátrica, psicológica y espiritual a los agentes que decidan participar voluntariamente en el proceso de rehabilitación.
Ocho casos en cuestión de horas
Ocho agentes de la policía de Chaco dieron positivo en los controles toxicológicos aleatorios realizados en diversas comisarías. Como resultado, los efectivos tendrán una licencia obligatoria de 65 días, durante los cuales no podrán portar armas ni mostrar credenciales. Aquellos que se nieguen a someterse a un proceso de rehabilitación podrían ser expulsados permanentemente de la fuerza.
El Ministerio de Seguridad provincial llevó a cabo los exámenes toxicológicos aleatorios, en cumplimiento con la Ley Nº 2.617-J, que establece el Control Obligatorio de Examen Toxicológico para las Fuerzas de Seguridad. Hasta el momento, se han detectado ocho casos positivos entre los agentes policiales.
Los agentes afectados fueron informados y, según el protocolo, el Departamento de Medicina Laboral ha dispuesto una licencia especial de 65 días corridos, durante los cuales no podrán portar armas reglamentarias ni credenciales. Al finalizar este período, la situación de los agentes puede cambiar dependiendo de la evolución de su condición, pasando a disponibilidad o a licencia por enfermedad.
MEDIDAS
Si los agentes aceptan someterse al tratamiento de rehabilitación y obtienen el alta médica, podrán reintegrarse al servicio activo. Sin embargo, aquellos que rechacen el tratamiento o no cumplan con los controles periódicos se enfrentarán a un Sumario Administrativo por Deserción, lo que podría resultar en su baja definitiva de la fuerza.