Una pelea entre vecinas que no se pueden ni ver por poco no se transformó en tragedia. Una de ellas le apuntó con un revólver al pequeño hijo de la otra. Fue detenida y se incautó el arma de fuego.
Fuentes policiales informaron a LA VOZ DEL CHACO que ayer, en horas de la madrugada, el personal de la seccional Séptima capital fue alertado sobre un desorden con uso de arma de fuego en la intersección de las calles Quijano y San Lorenzo.
Una vez allí se entrevistaron con una ciudadana (43), quien adujo que minutos antes una vecina (33) la habría amenazado con un arma de fuego.
Grande fue la sorpresa de los uniformados cuando fueron a ver a la sindicada, observando que empuñaba un revólver, por lo que de manera inmediata procedieron a desarmarla, secuestrando así un arma de fuego calibre 32 largo sin cartuchos en su alveolo.
Producto de ello, procedieron a trasladarla hasta la dependencia policial donde fue notificada de la causa, pero quedando en libertad y una orden judicial de restricción mutua.
LA PELEA
Pero trascendió que durante el enfrentamiento entre estas dos mujeres, una de ellas amenazó a un menor de edad con un revólver.
El incidente ocurrió alrededor de las 2.30 en la intersección de Quijano y San Lorenzo.
J.C.Y. (43), denunció que su vecina, G.E.G. (33), le había apuntado con un revólver calibre 32 a ella y a su pequeño hijo. Al parecer, la supuesta agresora luego de dijo que no molestara a sus propios vástagos.
Pero hubo algo más, además de la demora de la dama armada: Explicó que tuvo que esgrimir el revólver en su defensa, diciendo que J.C.Y. y otros vecinos intentaron ingresar por la fuerza a su vivienda, dañando el portón de acceso.
Según su versión, desenfundó el arma con el propósito de intimidarlos y evitar una posible agresión.
Ambas fueron llevadas a la comisaría, donde realizaron las denuncias correspondientes.