En el marco de las obras de infraestructura vial que se realizan en la región del Nordeste Argentino, la situación del Puente General Belgrano ha sido uno de los temas recurrentes en el ámbito público.
El jefe de Vialidad Nacional del Distrito 10, David Oscar Moulin, entrevistado por Radio Sudamericana, abordó diversas cuestiones relacionadas con el estado del puente y las medidas que se están implementando para garantizar su funcionamiento seguro.
A pesar de los rumores que circulan sobre su posible colapso, Moulin brindó tranquilidad a la población, detallando el estado actual de la estructura y los planes para mejorarla.
ESTADO ACTUAL
DEL PUENTE GENERAL BELGRANO
El Puente General Belgrano, que conecta la ciudad de Corrientes con la vecina ciudad de Resistencia, Chaco, es uno de los principales puntos de conexión de la región. De acuerdo con el jefe de Vialidad Nacional del Distrito 10, David Oscar Moulin, «la estructura del puente sigue cumpliendo su función». Sin embargo, como toda infraestructura que ha sido utilizada durante décadas, presenta algunas necesidades de mantenimiento. Uno de los problemas detectados es el reemplazo de las juntas del puente, unas estructuras clave para el buen funcionamiento de la vía.
El puente cuenta con un total de seis juntas, tres de las cuales nunca fueron reemplazadas desde su construcción hace más de 50 años. Moulin detalló que «el proceso de licitación para reemplazar estas tres juntas ya está en marcha» y que los trabajos de sustitución comenzarán en un plazo aproximado de 90 días. Las otras tres juntas también serán reemplazadas en el futuro cercano, ya que han pasado 10 años desde su instalación, y el desgaste debido al tránsito constante de vehículos también afecta su integridad.
Tranquilidad sobre el estado estructural del puente
A pesar de los rumores y videos que circulan en las redes sociales mostrando posibles daños en el puente, Moulin reiteró que «la estructura del Puente General Belgrano se encuentra en buen estado».
El funcionario aclaró que, si bien el mantenimiento es fundamental, el puente sigue siendo seguro y funcional. Sin embargo, la falta de ciertos trabajos de mantenimiento, como el reemplazo de las juntas, es un aspecto que ha quedado pendiente durante muchos años, lo cual es comprendido por las autoridades actuales.
En cuanto a la circulación del tráfico, Moulin destacó que el puente sigue cumpliendo su rol, pero que la interrupción del tránsito por cualquier inconveniente en la estructura puede generar grandes problemas en la ciudad.
El funcionario recalcó que el tráfico sobre el puente no solo afecta la conectividad entre Corrientes y Resistencia, sino que también impacta en el flujo del tráfico local en la ciudad de Corrientes, remarcando que la falta de un puente adicional genera una dependencia excesiva de esta única vía, lo que agrava las situaciones de congestión en momentos críticos.
Proyectos y diálogos pendientes
El alto volumen de tráfico que circula diariamente por el Puente General Belgrano es otro factor que ha puesto sobre la mesa la necesidad de construir un segundo puente.
Según los datos proporcionados por Moulin, alrededor de 25.000 vehículos atraviesan el puente cada día, cifra que aumenta durante la temporada alta de turismo, cuando la cantidad de vehículos pesados y livianos puede elevarse.
Este tránsito constante ha generado una sobrecarga en la infraestructura, lo que se traduce en la necesidad de descomprimir el tráfico, especialmente en las ciudades de Resistencia y de Corrientes.
En este contexto, Moulin destacó la importancia de retomar el proyecto del segundo puente, que ya cuenta con un proyecto ejecutivo en carpeta, pero que no ha avanzado de manera significativa en los últimos años.
En este sentido, el jefe de Vialidad Nacional señaló que, a través de conversaciones con el diputado Lisandro Almirón, «se pretende volver a impulsar el proyecto ante las autoridades nacionales». El objetivo es lograr que el gobierno nacional reconozca la importancia de esta obra para la región del NEA y avance con su ejecución.
El proyecto del segundo puente también tiene como objetivo aliviar el tránsito en la ciudad de Corrientes, particularmente en el Corredor Belgrano, una de las principales arterias de la ciudad, que se congestiona rápidamente en situaciones de accidente o tráfico intenso.