Fabricio Bolatti y Lucila Masin, en respuesta a la demanda de distintos sectores, así como de vecinos y vecinas de Resistencia, que hicieron llegar sus inquietudes y reclamos por distintos medios y que a la fecha no han tenido respuesta del Ejecutivo municipal, presentaron una iniciativa que propone la implementación de una estructura tarifaria diferencial, para atenuar el impacto negativo de la medida oficial inicial.
El proyecto de ordenanza se da en el marco de la implementación del Sistema Inteligente de Estacionamiento Medido (Sidem), y tiene como objetivo: facilitar y promover la actividad comercial y de servicios que se desarrollan dentro de la zona medida, así como generar alternativas para quienes tienen que estacionar sus vehículos por varias horas, o turno completo y en forma diaria, normalmente por razones laborales.
Los ediles indicaron que «la medida oficial recae directamente sobre estos sectores que son principales en la ciudad, ya que por concentrarse en la zona medida gran parte de las oficinas públicas y empresas comerciales y de servicios, como las de compras, se genera una enorme afluencia de personas que requiere adaptar la norma contemplando esta realidad, y no que la realidad se vea fuertemente afectada por malas decisiones tomadas por funcionarios cuya tarea principal es la de atender y dar respuestas a quienes lo eligieron para ello».
«Queremos generar una estructura tarifaria que sea justa y que permita a todos los sectores de la ciudad seguir desarrollando sus actividades sin la preocupación de que el costo del estacionamiento afectará directamente su productividad o estabilidad económica», remarcaron Bolatti y Masin, y recordaron que oportunamente acompañaron y trasladaron el reclamo de frentistas sobre quienes recaía sin ninguna mirada especial, la medida que graba el uso del espacio público, logrando que se contemple dicha inquietud por parte del oficialismo.
La fuerte contradicción
Los ediles señalaron que por lógica y sentido común, «los tributos son la consecuencia de la necesidad de contar con recursos que puede requerir la prestación de un servicio o la resolución de un problema comunitario que debe ser atendido por el Estado, y para ello recae sobre la misma comunidad beneficiada la necesidad de tributar.
Pero nuestra realidad va a contramano de la lógica y el sentido común, donde es el tributo o la forma de su percepción, la que está generando los problemas que ahora debemos atender y para lo que las y los ciudadanos deben aportar», dijo.
Es decir «se crea la necesidad de recaudar como objetivo en sí mismo, y el ejercicio de esa facultad es la que va generando los inconvenientes a la comunidad, que son nuevamente abordados por la gestión que desarrolla un sistema de tratamiento más organizado de los problemas originados, decidiendo crear mayor capacidad de recaudación al ampliar las zonas y subiendo la tarifa en forma desproporcionada.
Quedando más claro aún, que la medida del estacionamiento medido, no aporta en lo más mínimo al ordenamiento de la movilidad urbana, dejando ver solo la voracidad recaudatoria que viene desplegando la actual gestión, emulando a su antecesor, haciendo crecer el valor de la carga tributaria principal, pero no así la calidad y alcance de los servicios prestados», resaltaron.
En ese marco, los concejales marcaron que la iniciativa presentada no solo responde a la necesidad de flexibilizar el esquema que se pretende aplicar imponiendo costos elevados a quienes requieren estacionar por períodos.
Algunos aspectos principales de la propuesta
La iniciativa busca establecer, en el marco de la implementación del Sidem, una estructura tarifaria diferencial según sea centro, micro o macrocentro de la ciudad, donde computarán para su valor: el 100% de la tarifa única, el 70% y el 50% respectivamente, según la ubicación del espacio a determinar.
Pero que además reconozca tres «tipos» de zona: tipo comercial o de servicios, de jornada laboral y tipo clásica.