El expresidente y referente del PRO, Mauricio Macri, encabezó este miércoles un encuentro de la Mesa Ejecutiva del partido en el Bajo porteño, en un contexto de creciente tensión con el Gobierno Nacional tras la designación de Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla como jueces de la Corte Suprema.
A diferencia de otras oportunidades, Macri no respalda la medida, e incluso manifestó que considera un desacierto la decisión del oficialismo.
Durante la reunión, los dirigentes analizaron la coyuntura política nacional, incluyendo la postulación de Lijo para la Corte Suprema y las negociaciones en torno a un posible acuerdo con La Libertad Avanza.
Participaron figuras como los diputados nacionales Diego Santilli y María Eugenia Vidal, además del intendente de General Pueyrredón, Guillermo Montenegro, entre otros referentes del espacio.
Todo indica que la mayoría del bloque del PRO no acompañará el pliego de Lijo para la Corte, manteniendo la misma postura que sostuvo a lo largo del último año.
Por su parte, Alfredo De Angeli, titular del bloque de senadores del PRO, adelantó que rechazarán la propuesta del oficialismo, cuyo debate continuará en la Cámara Alta.
En simultáneo, el PRO sigue trabajando en la consolidación de su espacio de cara a las próximas elecciones, avanzando en negociaciones con La Libertad Avanza para competir en distintos puntos del país. Aunque hay consenso para un acuerdo, aclararon que se definirá «distrito por distrito», sin perder «la identidad y el sello» del partido.