Fuentes policiales informaron a LA VOZ DEL CHACO que el jueves, cerca de las 20.30, la División Sustracción Vehicular fue informada sobre un supuesto robo en calle Franklin al 1195.
Martín Livio Correa (55) fue una de las víctimas, quien relató que estaba con su padre Raimundo (83) y que por la tarde, llegó una pareja, ofreciendo repasadores y trapos de piso, momento en el cuál estos de manera imprevista ingresaron por la fuerza a la vivienda, para luego atar con un cable las manos del damnificado, exigiéndole dinero, manifestando que si no lo hacía matarían al padre (discapacitado), quien se encontraba recostado en su cama ya que posee poca movilidad.
Correa les indicó que no tenía dinero por lo que los autores, tomaron un cuchillo con el cual lo amenazaron, para luego proceder a sustraerle una moto y otros artículos, emprendiendo la huida hacia la calle Franklin, en sentido ascendente.
Con la premura de caso, los detectives de esta División realizaron un operativo cerrojo en barrios aledaños y al llegar al San Valentín, ingresaron por calle 15, donde observaron el paso de una pareja a bordo de una motocicleta de similar característica a la sustraída.
Estas personas, al notar la presencia policial, aceleraron su marcha, por lo que se inició un seguimiento controlado, el cual finalizó en intersección de Ingeniero Schur y Fortín Warner.
La femenina descendió inmediatamente y siguió corriendo, tratando de ingresar a un domicilio de zona, pero con el rápido accionar se procedió a la demora de la misma, siendo identificada como Antonella C. (30). También se procedió a la demora de Ricardo Daniel A. (33).
Acto seguido se procedió a controlar la motocicleta, siendo efectivamente la sustraída a Correa.
Continuando con las diligencias se procedió a controlar una caja blanca, la cual contenía el televisor y demás elementos robados.
Pasado unos pocos minutos y esperando la presencia de más empleados, se acercó un grupo de personas, entre ellos familiares de ambos, quienes comenzaron a insultar a los agentes, como así también arrojaron elementos contundentes, los cuales no lograron impactar en la humanidad de los informados, pero si impactar en el parabrisas del patrullero, provocando la rotura del mismo.
Se replegaron con el fin de preservar la integridad física de las personas demoradas y de los empleados policiales hasta el pasaje Fortín Rivadavia al 2400.
La fiscalía actuante dispuso el secuestro de los bienes y la aprehensión de ambos conducidos en causa ut supra.
