El precio se actualizó para compensar el ritmo mensual de la devaluación y un posible incremento de un impuesto. El despacho acumula quince meses consecutivos de caída interanual.

$1274 la Super y $1550 la Infinia en Resistencia. Mientras que la Diesel $1323 y la Infinia Diesel $1587. Fotos: Osvaldo Ramírez, La Voz del Chaco.
Desde este martes 1° de abril comenzó a regir un nuevo aumento de los precios de la nafta y el gasoil en los surtidores. El aumento en el que trabajaron las petroleras no supera el 1,75% mensual promedio para sus combustibles, en línea con el movimiento de marzo, según dijeron a Infobae fuentes de YPF.
De esta manera, el Gobierno oficializó el incremento en los impuestos que se trasladan a los combustibles líquidos y al dióxido de carbono, a través del Decreto 243/2025, publicado en el Boletín Oficial.
Durante marzo, se mantuvo la volatilidad en los valores internacionales del petróleo, algo que quitó presión a nivel local. El incremento sirve para acompañar el ritmo de ajuste mensual del tipo de cambio oficial –crawling peg-, de 1%, y una suba marginal del impuesto a los combustibles líquidos. El Gobierno mantuvo diferida la actualización del tributo desde mayo del año pasado, para evitar sumar presión a la inflación.
Nuevo mes, nuevos precios
Las pizarras de YPF en la capital chaqueña
$1274 la Super y $1550 la Infinia en Resistencia. Mientras que la Diesel $1323 y la Infinia Diesel $1587.

En el mercado aguardaron a que el primer paso de los incrementos lo haga YPF, como es usual. La petrolera estatal concentra el 60% del mercado local y sus competidoras suelen aplicar subas en la misma línea.
En las estaciones de servicio de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) el precio que regía en los combustibles por litro en YPF, fue el siguiente:
- Super $1.173
- Premium $1449
- Gasoil $1.188
- Euro $1.448
A esos precios, corresponde sumarles, a partir de este martes, el 1,75% de incremento, en promedio a nivel nacional.
Desde su llegada al poder, Milei impulsó una liberalización del precio local de los combustibles tras el atraso que dejó la gestión anterior. La nafta en la Ciudad de Buenos Aires pasó de $311 en noviembre de 2023, antes del recambio presidencial, a $1.173 en marzo de 2025, según el portal especializado Surtidores. Esto representa un aumento del 277,5% nominal, muy por encima de la inflación acumulada en el período.
Sin embargo, la mayor parte de ese incremento se produjo en el inicio de la gestión libertaria; posteriormente, los aumentos se alinearon con el deslizamiento del tipo de cambio y la variación del impuesto a los combustibles. De hecho, el Gobierno postergó de manera ininterrumpida, desde mayo del año pasado, la actualización del tributo basada en la variación trimestral del Índice de Precios al Consumidor (IPC) del Indec.
Las subas de este impuesto suelen trasladarse automáticamente a los surtidores, pero el Gobierno decidió posponerlas para evitar poner en riesgo la desaceleración de la inflación, a costa de resignar recaudación por más de USD 200 millones al mes, según cálculos de la consultora Economía y Energía. La variación mensual del IPC en diciembre de 2023 fue del 25,5%, mientras que en enero pasado fue del 2,2%, la más baja desde julio de 2020. Si se actualizara el tributo, el impacto sería un aumento de $207 por litro en la nafta y $115 por litro en el gasoil.
Ventas de combustible, en caída
La venta total de combustibles al público en Argentina alcanzó en febrero de 2025 un volumen de 1.309.505 metros cúbicos, entre naftas y gasoil, lo que representó una caída del 4% interanual respecto del mismo mes del año anterior. La baja también se reflejó en la comparación mensual, con un descenso de 7,9% frente a enero de 2025. Con este resultado, el sector acumuló quince meses consecutivos de contracción.
Los datos provienen de un informe elaborado por Politikon Chaco en base a estadísticas oficiales de la Secretaría de Energía de la Nación. En el detalle del total comercializado durante febrero, las naftas concentraron el 58% del volumen, mientras que el gasoil explicó el 42% restante.
Dentro del segmento de naftas, la evolución interanual mostró una baja del 1,1% a nivel nacional. Este comportamiento se explicó por la caída del segmento súper, que descendió 4,8%, mientras que el tipo premium volvió a mostrar un crecimiento, con un aumento del 11,3%, aunque en volúmenes más reducidos.

En el caso del gasoil, la contracción interanual fue más marcada, con una disminución del 7,7% respecto de febrero del año anterior. Según el informe, el gasoil común retrocedió 14,7%, mientras que el gasoil premium exhibió un incremento del 5,8% en el mismo período.
A nivel geográfico, el informe identificó seis provincias que registraron aumentos interanuales en las ventas totales de combustible. Formosa encabezó esa lista con un alza del 3,1%, seguida por Chubut, con un 2,4%. También mostraron avances Neuquén, Tierra del Fuego, Chaco y San Juan, aunque con incrementos inferiores al 1%.
Por el contrario, dieciocho jurisdicciones del país mostraron caídas en la comparación interanual. Entre ellas, las mayores retracciones se observaron en Río Negro, la Ciudad de Buenos Aires y Tucumán, todas con descensos de doble dígito. CABA registró una baja del 12,8%, Río Negro del 13% y Tucumán del 15,1%.
En cuanto al tipo de combustible más vendido por provincia, la nafta lideró en 22 de las 24 jurisdicciones del país. Los casos excepcionales fueron La Pampa y Mendoza, donde el gasoil superó en volumen al consumo de naftas.

Fotos: Osvaldo Ramírez, La Voz del Chaco.
Con información de Infobae.