La marea inflacionaria sigue alcanzando productos de consumo masivo y esta vez le tocó a la cebolla, base de la cocina diaria de los hogares, y que hace varias semanas ubicó su precio entre los $300 y $400 el kilo en promedio. Desde la Cooperativa Frutihortícola, su titular Américo Barúa explicó, en declaraciones a Radio Facundo Quiroga, que a pesar de ser varios los factores que inciden en este incremento, como los estacionarios, con nevadas o sequías que mermaron la producción en un 60%, o inflacionarios, debido a la incidencia de los costos logísticos de traslado, al normalizarse la producción y abastecimiento también se reacomodan sus precios, lo que aseguró sucedería en 15 o 20 días en este caso en particular. En este sentido, destacó que frutas y verduras son prácticamente los únicos productos que tras un incremento de su costo vuelven a bajar. El referente del sector manifestó su preocupación por la situación al advertir la depreciación del poder adquisitivo de los consumidores y aseguró que «no nos sirve cuando el producto está muy caro».
El caso de
la cebolla
Barúa, en primer lugar, recordó que el Mercado Central de Resistencia se dedica a la venta mayorista abasteciendo a más del 70% de la provincia: «Comerciantes, feriantes, fruterías, supermercados», enumeró. Tras esto indicó que en promedio se vende la bolsa de 18 kilos a $3.500 ($200 el kilo en el mercado).
Al mismo tiempo comentó que «con el que más tenemos problemas es con el zapallo brasileño, otro producto que está excesivamente muy caro, porque no hay, al igual que la cebolla en todo el país, los motivos son varios, pero es la realidad».
«Lo que queda es un poco de la cosecha anterior, que la llaman cebolla tratada, porque hay que tratarla fuera de cosecha, que es la que se fue muy arriba los precios, pero la cebolla nueva está comenzando a entrar en algunas zonas, pero muy escasas todavía, así que va a costar otros 15 o 20 días para normalizarse», anticipó». Una vez que se abastece el mercado, por lo general, en este rubro se reacomodan los precios.
Asimismo, dimensionó: «La cebolla hoy estamos con un promedio de abastecimiento del 40% de lo que es comúnmente, eso genera esta disparada de los precios, porque los mercados se manejan usando las leyes de la oferta y la demanda y por eso es que fluctúan los precios, un día suben otro bajan».
factores
del precio
Al momento de explicar los motivos de la suba, Barúa señaló: «Al sur Buenos Aires y Mendoza, que son productoras de cebollas, tuvieron enormes nevadas, heladas, que en general antes de la cosecha a la cebolla por ahí no le afecta, pero postcosecha le afecta bastante. Y ni hablar de las grandes sequías que estamos teniendo de vuelta. Esto demoró la nueva cosecha».
Además de los factores climáticos se suman otras variables como el transporte. «Con los aumentos del combustible, los insumos, fertilizantes son todos importados», aportó y dimensionó: «Tenemos una provincia importadora en un 85% de todos los productos que vendemos y el promedio de distancia de los productos hacia este mercado superan los 1.500 kilómetros, un flete de 1.300 para traer cebolla, papa, son muchos los componentes del precio, uno cree que lo tenemos acá a la vuelta, pero lamentablemente no es así», describió.
A modo de ejemplo indicó que «la papa no está muy barata, pero tampoco está muy cara, una bolsa de papa de 18 kilos está $1.500 la bolsa, así que vale casi un kilo de fruta».
«La fruta en un 100 por 100 nos abastecemos de zonas muchos más lejanas, pero no hubo tanto aumento, sacando algunos productos como la banana, la manzana, el cítrico se reacomodó y no tenemos tantos problemas».
Barúa no obstante aseveró que «ni bien se acomode el abastecimiento se va a normalizar el precio, aproximadamente a los precios reales, no creo que totalmente, pero tiene que reacomodarse. Para mí en 15 o 20 días se van a normalizar los precios, por lo menos para la cebolla que es un caballito de batalla, porque es el consumo más popular».
Para dimensionar el consumo de este producto comparó: «La papa es el producto que más se vende en el mercado, después la cebolla, el tomate, la verdura de hoja», comentó.
Seguidamente comparó otros productos que suben y no bajan nunca, excesivamente además, como la indumentaria, la carne o el pan.
Sin embargo, en el mercado la ley de oferta y demanda forma los precios «esas son las reglas de juego, porque nadie puede monopolizar el mercado, la competencia que hay adentro con dos metros de distancia es imposible, que uno pueda vender y competir con los precios, más teniendo en cuenta que es un producto perecedero, si no se vende hoy o mañana, así sea papa, cebolla y ni hablar de la hoja, o tira el 50% o tiene que vender sí o sí».
A modo de reflexión final indicó que «estamos muy preocupados porque no nos sirve cuando el producto está muy caro, siempre lo dije, si el poder adquisitivo está muy deprimido, caído, bajo, de qué nos puede servir que valga $20 mil la bolsa si el consumidor no puede comprar».