La Universidad Nacional del Nordeste (Unne) inauguró un nuevo espacio institucional destinado a las Políticas de Género y Diversidad involucrándose de lleno con un proyecto liderado por la Universidad Nacional de Cuyo (Uncuyo) y el Programa Conjunto de las Naciones Unidas para el VIH/Sida (Onusida), denominado Formación de Formadores en Derechos Humanos, Diversidad Sexual e Identidad de Género en relación al VIH/Sida.
En este marco, la Unne albergó en el seno de la Carrera de Comunicación Social -ubicada en el campus Cabral en Corrientes- a actores de Positivo Goya, el Laboratorio Central de la provincia de Corrientes, el Colegio de Bioquímicos, Cruz Roja, el Programa Provincial de VIH e ITS en tres jornadas consecutivas donde se buscó fundamentalmente educar y formar a distintos actores, con el fin de que puedan:
– Promover la incorporación de una perspectiva basada en DDHH, Identidad de Género, Diversidad Sexual, Género e interculturalidad en los centros de salud y ámbitos educativos;
– Incentivar acciones para poner fin al estigma y discriminación en las instituciones
– Consolidar ámbitos de salud, educativos y otros equitativos e igualitarios
- Aumentar el acceso a diferentes servicios de salud por parte de las poblaciones vulnerabilizadas
– Contribuir a alcanzar la meta de «Cero discriminación a 2030»… entre otros.
Cambiar la mirada y el trato sobre
el VIH
En charla con Unne Medios, uno de los actores involucrados por Corrientes, quen es -además de ser presidente de la Fundación Positivo Goya- vicepresidente de Redar (organización con más de 22 años de actividad que trabaja a nivel federal con VIH y ETS), Hernán Scheller, contó sobre la importancia de lo sucedido en este multiencuentro para formar a futuros formadores.
Este proyecto es clave -enfatiza Hernán con su mano- no solo por la multiplicidad de referentes que se congregaron en la Unne provenientes de las distintas organizaciones civiles, sino, fundamentalmente, por la importancia de poder formar equipos para que el día de mañana puedan replicar los conocimientos adquiridos aquí en sus entornos, y lograr cambiar la mirada y el trato que existe hoy en día sobre el VIH.
«Y vos me dirás, ¿por qué digo esto? porque en nuestra sociedad aún persiste el estigma, la discriminación, el no acceso a la atención en salud por el rechazo de un paciente infectado por los profesionales médicos», relata Scheller.