Tras el brote relacionado con las bacterias shigella y salmonella, que se registró en la provincia de Buenos Aires, el Ministerio de Salud Pública del Chaco, en línea a Salud de la Nación, recordó los cuidados que se deben tener para prevenir enfermedades transmitidas por alimentos.
Dos muertos y otros dos intoxicados se registraron en Berazategui luego de consumir productos cárnicos.
La salmonelosis es una enfermedad transmitida por alimentos causada por bacterias del género salmonella -que suelen vivir en los intestinos de animales y humanos, y se liberan mediante las heces-.
Esta infección se contrae a través de alimentos contaminados, algunos de los cuales son más sensibles a ser expuestos a la bacteria que produce la salmonelosis.
Los síntomas más frecuentes son náuseas, vómitos, dolores abdominales, diarrea, fiebre, dolor de cabeza; normalmente comienzan entre 6 y 72 horas después de la exposición y duran de 4 a 7 días.
Los hechos
Los casos registrados fueron notificados al Sistema Nacional de Vigilancia de la Salud (SNVS) y desde la Dirección de Vigilancia Epidemiológica y Control de Brotes de Buenos Aires se informó que se está realizando una búsqueda retrospectiva de casos de diarrea aguda o con clínica compatible con intoxicación alimentaria, con domicilio en Berazategui y municipios colindantes.
Desde el 1 pasado a la fecha no se registraron otros casos compatibles ni incremento inusual de casos de diarrea aguda, aseguraron.
Para la identificación del agente etiológico (causante) las muestras de los pacientes fueron derivadas al Laboratorio Nacional de Referencia -Anlis Malbrán- y las muestras de alimentos -que fueron recolectadas tanto en las casas de los pacientes como en las carnicerías donde hicieron las compras (una de ellas clausurada)- se encuentran en el Instituto Nacional de Alimentos y se aguardan los resultados.
Las salmonellas y shigellas son bacterias asociadas con trastornos digestivos principalmente -aunque no de forma exclusiva, también escherichia coli enterotoxigénica, explicó a Télam el investigador del Conicet Víctor Romanowski, quien dirige el Laboratorio de Virología Molecular del Instituto dde Biotecnología y Biología Molecular (IBBM) de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP-Conicet).
El especialista explicó que estas bacterias «se transmiten a las personas principalmente a través del consumo de agua o alimentos contaminados como carne picada cruda o poco cocinada o vegetales crudos (mal lavados) y también por el contacto directo con animales o con personas infectadas».
«El problema persiste cuando se consumen alimentos crudos, como pueden ser las verduras, contaminados con alimentos de origen animal que contienen esas bacterias o manipulados con manos no higienizadas que estuvieron en contacto, por ejemplo, con pañales de un bebé con diarrea; es un tema para los departamentos de bromatología de los diferentes distritos y de educación de la población en normas de manipulación de alimentos», precisó.
RecomeNdaciones
Entre las medidas que los organismos sanitarios recomiendan se encuentra la limpieza de las superficies, recipientes, utensilios y equipos de trabajo que se utilicen para elaborar productos con huevo crudo y otros alimentos crudos como carnes, antes y después de cada uso.
Es importante lavarse las manos con agua y jabón antes y después de manipular alimentos, después de ir al baño y después de tocar animales, alimentos de las mascotas o su entorno.
Se deben proteger los alimentos y la cocina de insectos, mascotas y otros animales, lavar con abundante agua segura y en forma minuciosa las frutas y verduras, especialmente si se van a consumir crudas.
Es imprescindible elegir usar agua y alimentos seguros, consumir leche y derivados pasteurizados, preferir huevos frescos en su período de aptitud (ver fecha de vencimiento) de productores que aplican buenas prácticas en el manejo de las granjas.
Evitar el consumo de alimentos que contengan el huevo crudo o poco cocido, especialmente si se encuentra entre los grupos de mayor riesgo (niños y niñas, personas gestantes, adultos mayores y personas con problemas de inmunidad).
Se necesita separar y evitar la contaminación cruzada, no acercar carnes crudas (vacuna, ave o pescado) de otros alimentos en todo momento (cuando se realizan las compras, al almacenar en heladera y durante la preparación de las comidas/platos). No lavar pollo crudo o carne cruda antes de cocinarlos, ya que esto puede propagar gérmenes en la cocina (solo la cocción destruirá las bacterias presentes).
Es muy importante cocinar completamente los alimentos (por encima de 71 °C en el centro del alimento) las carnes rojas, de ave, el huevo y las preparaciones que los contengan. Una vez cocidos, los alimentos deben mantenerse a una temperatura por encima de los 60 °C, de lo contrario conservarlos en la heladera hasta el momento de su consumo.
Mantener temperaturas seguras durante toda la preparación, no dejar las preparaciones por más de una hora a temperatura ambiente, especialmente en verano. Mantener los alimentos elaborados con huevo crudo como mayonesas, salsas, helados, cremas y masas de pastelería a temperaturas seguras (calientes por encima de 60ºC o refrigerados en la heladera) hasta su consumo. Tras su consumo, refrigerar los excedentes inmediatamente y desecharlos transcurridas las 24 horas.
Las personas que presentan diarrea no deben manipular alimentos. Esto es esencialmente clave en establecimientos elaboradores de alimentos. Para consultas se pueden comunicar a la Dirección de Bromatología Provincial (0362) 4426481, ubicada en Ameghino 680 – Resistencia.