Luego de conocerse el dato récord de inflación de marzo, que alcanzó el 7,7%, la ministra de Trabajo, Raquel “Kelly” Olmos, aseguró que en el salario de los trabajadores formales, del sector público y privado “no tuvieron pérdida adquisitiva desde el 31 de diciembre hasta el 31 de marzo”.
Lejos de asumir la responsabilidad por el más alto durante la gestión de Alberto Fernández), la funcionaria indicó que la cifra se explica por la “situación estructural de escasez de divisas”, que adjudicó al gobierno de Mauricio Macri, y al impacto de la sequía en las reservas del Banco Central (BCRA).
“Este 7,7% de inflación tiene que ver con las condiciones en que recibimos el gobierno y ahora con la sequía, que impactó muy fuerte en el ingreso de divisas y en los del Estado”, remarcó Olmos en declaraciones a la radio AM750.
La ministra también se refirió a las paritarias en curso: explicó que desde la cartera laboral buscarán habilitar todos los pedidos de revisión que se formulen, por los altos niveles de inflación.
“Hay que reducir los plazos (de negociación paritaria) para que no se afecte la capacidad de recuperación de los salarios”, declaró. Y agregó: “El (salario) formal lo estamos siguiendo mes a mes, no perdemos la atención del tema”.
“Con relación al sector informal, la respuesta del Gobierno ha sido aumentar el monto de la Tarjeta Alimentar en un 35%”, comentó Olmos.
La funcionaria sostuvo que “el salario no puede ser la variable de ajuste” y que “no es con más nominalidad que se resuelve la inflación”.
Olmos completó: “No es que los gremios se opongan a un mayor ingreso de sus trabajadores, al contrario, ellos impulsan los aumentos. Es muy importante bajar la alta inflación que afecta el estado de ánimo”.