River se dio el gusto del segundo semestre al quedarse con un intenso y emotivo Superclásico jugado en La Bombonera. El partido, válido por una nueva fecha de la Copa de la Liga, se definió por los goles del venezolano, Salomón Rondón, a los 41´ del primer tiempo; y de Enzo Díaz, en el tercer minuto de descuento del segundo tiempo.
El Millonario cortó una extensa racha adversa jugando en calidad de visitante, y quedó segundo en la tabla de la Zona A del torneo, a sólo una unidad del puntero Independiente.
Para Boca, no quedará otra que dar vuelta rápidamente la página y enfocarse en el trascendental partido que tendrá el próximo jueves, cuando dispute el partido de vuelta de la semifinal de la Copa Libertadores. En el plano local, el conjunto de Almirón quedó décimo en la Zona B y, por el momento, afuera de la clasificación al torneo continental más importante el año que viene.
Emociones hasta el final
Con prioridades distintas, Demichelis mandó a la cancha a lo mejor que tenía disponible, y Almirón propuso un equipo totalmente alternativo respecto del que jugó el jueves pasado frente al Palmeiras, por la Libertadores.
River arrancó mejor y monopolizó la pelota en los primeros 15 minutos de juego, pero el esquema con cinco volantes definido por el entrenador obligó a centralizar el juego en ataque y la defensa Xeneize respondió aceptablemente.
Una pelota filtrada de Nicolás De la Cruz para Rondón, que el venezolano no pudo bajar para definir; y un remate de Leandro Gonzáles Pires, tras un rebote en el área chica, había sido las más claras para el visitante.
Boca reaccionó en la segunda mitad de esa primera etapa, ajustó las marcas en tres cuartos de campo propio y aprovechó los espacios a las espaldas de los volantes Millonarios. Sin embargo, el conjunto de Almirón concretó muy poco, y sólo un remate de lejos de Darío Benedetto inquietó a Armani.
En el segundo tiempo, Almirón movió el banco. Mandó a la cancha a Medina, Valentín Barco y Ezequiel “Equi” Gonzáles. El Xeneize atropelló a River en los primeros 10´y generó un par de llegadas claras que lograron desactivar el chileno Paulo Díaz (la gran figura de la defensa) y Marcerl Herrera.
El partido se rompió y River lo tuvo con Lanzini y Barco, pero “Chiquito” Romero salvó a Boca.
A los 24´ ingresaron Edinson Cavani y Exequiel Zeballos para acompañar en el ataque a Janson y Benedetto.
El uruguayo tuvo el empate, en una jugada que terminó siendo anulada por off side, a través del VAR, a los 29´, y a partir de allí, Boca tuvo ganas pero le faltaron ideas para lastimar a un River que terminó plantado con una línea de cinco.
Sobre el final, una buena jugada entre Exequiel Barco y Facundo Colidio le permitió a Enzo Díaz quedar de cara al gol y sentenciar el partido para el visitante. River ganó en La Boca después de cinco años y, por ahora, aleja los fantasmas sobre la continuidad del técnico Martín Demichelis.