Hoy, 6 de enero, el santoral católico conmemora el Día de los Reyes Mago, efeméride que recrea la visita de Melchor, Gaspar y Baltasar, al recién nacido niño Jesús, con obsequios. Es por esto que la tradición manda a los niños y niñas de los hogares a dejar sus «zapatitos» en las ventana durante la noche del 5, con pasto y agua para los camellos, ya que al igual que Papá Noel, estos viajeros visitan durante la madrugada los hogares dejando regalos para las infancias que encuentran al día siguiente al despertar.
Sin embargo este año, los reyes saltearán muchas casas que, afectadas por la devaluación, la estampida de precios y liberación de regulaciones, no pudieron hacer frente a esta costumbre arraigada en las familias argentinas.
Esto fue palpable al recorrer las jugueterías y comercios del centro y la peatonal de la capital chaqueña, donde a simple a vista se pudo observar el escaso movimiento de gente, y la consecuente poca demanda. Contrario a otros años, los comercios estuvieron prácticamente desiertos y las postales de filas en las cajas parecen haber quedado en el pasado.
Para las jugueterías, librerías y otros comercios, si bien el fuerte de las ventas se da durante Navidad, esta fecha también motoriza el consumo y da un respiro para poder afrontar lo que resta de enero y febrero.
Sin embargo, la depreciación de los salarios ante el constante aumento de los precios golpeó duro en los bolsillos, y no pudieron incentivar ni atraer ventas. Pocas o nulas promociones con tarjeta de crédito, precios exorbitantes, y poca capacidad de generar ofertas, conformaron este combo.
relevamientos
A nivel nacional, la situación es similar. Según la consultora Focus Market, «la Navidad registró una caída de las ventas minoristas del 2,8% y para Reyes Magos las perspectivas no son mejores», dijo.
El sector juguetero en la Argentina se activa alcanzando el mayor volumen de ventas en tres fechas claves, que representan cerca del 95% del total de operaciones en el año. En ese sentido: el Día del Niño, equivale a un aproximado del 55% del total de las ventas anuales, mientras la fecha de festividad por la Navidad, reúne el 25% y los Reyes Mayos, acumula el 15%.
El relevamiento de la consultora Focus Market, tras analizar la variación de precios analizó el impacto sobre los mismos juguetes que fueron relevados el año pasado y en comparación con 2024: el aumento interanual 2023 versus 2024 asciende hasta un 360%.
A pesar que los precios de los juguetes registraron fuertes subas en el sector se espera que tengan gran protagonismo los planes promocionales «Ahora» para captar una tasa baja.
«Dentro de los planes de financiamiento el Ahora 12 tiene una tasa real negativa y es una forma de oxigenar el bolsillo con un costo financiero total muy por debajo de la inflación proyectada para 2024. El inconveniente es la suba de los límites de crédito disponibles por los bancos y emisoras de tarjetas de crédito», destacó Damián Di Pace, director de la Consultora Focus Market.
El informe de la consultora apunta a realizar una evaluación respecto de cuáles son los regalos que se compran para esta fecha, cuales son los lugares elegidos para comprar, cuál será el nivel de gasto proyectado por los Reyes Magos versión 2024 y cuáles se reflejan como los canales de venta con mayor nivel de operaciones para la fecha del 6 de enero.
En ese contexto, el informe mostró cuáles son los rubros con mayor demanda proyectada al momento de diagramar los regalos en fecha de Reyes Magos: Juguetes 29%, Indumentaria 16%, Artículos Deportivos 11%, Calzados 9%, Videojuegos y consolas 8%, Libros didácticos 8%, Artículos de computación 7%, Telefonía celular 5%, Golosinas 5%, y Peluquería infantil 2%.
En cuanto a los lugares de compra con mayor proyección de demanda para las compras de Reyes Magos son: 34% Centros Comerciales a Cielo Abierto, 25% Comercio Electrónico, 24% Shopping, 8% Outlet, 7% Supermercados y 2% Tiendas de Garage/Show Room.
El gasto promedio, ronda en más o en menos, los $20 mil por cada ticket por regalos.
Fiestas con bajas ventas
Mientras que según el informe del Indecom, las ventas para las fiestas, tanto en alimentos como en obsequios, cayeron un 36,6% aproximadamente, superando al 35,6% registrado en 2001, y solamente por debajo del 40,4% que se registró en 2020, aunque el escenario era distinto debido a la pandemia del Covid-19.
Pasando estrictamente a lo que ocurre en el rubro de jugueterías, la Cámara Argentina de la Industria del Juguete comunicó que la merma en ventas fue del 6% en Navidad, que gracias a la Noche de Las Jugueterías (realizada entre el 21 y el 24 de diciembre), el porcentaje se hubiera situado en un 10%.
La situación no fue diferente en vísperas de la llegada de los Reyes Magos: las jugueterías siguieron con la misma tendencia de bajas ventas debido al valor de los juguetes. Los clientes consultan, buscan precios y muchas veces se van sin comprar.
Desde el otro lado del mostrador, comerciantes calculan que las ventas cayeron alrededor de un 15% con respecto al año pasado. En ese sentido, confirman que no hay mucho movimiento durante estos días.
La historia detrás de la tradición
Todos los 6 de enero, distintos países celebran el Día de Reyes Magos. Este año, el festejo cae sábado y no tiene estatus de feriado y/o día no laborable, como sí sucede con Nochebuena, Navidad y Año Nuevo.
Esta es una festividad que conmemora un episodio bíblico, del Nuevo Testamento, que rodea el nacimiento del niño Jesús.
El festejo de Reyes simboliza el fin del período navideño. Según narra la historia, los Reyes Magos de Oriente viajaron guiados por el brillo de la estrella de Belén, en la búsqueda del hogar del niño Jesús y con el objetivo de llevarle regalos.
La historia del catolicismo nombra a los reyes magos en el Evangelio según Mateo 2: 1-12, donde relata la historia del rey Herodes que, tras el nacimiento de Jesús en Belén de Judea -y perseguido por una profecía que anunciaba el nacimiento del rey de los judíos-, ordena a Baltasar, Melchor y Gaspar encontrar el paradero del recién nacido.
Es así que los tres reyes se encaminaron en la búsqueda de Jesús. El texto explica que «al entrar vieron al niño con María, su madre. Se hincaron y lo adoraron. Abrieron sus tesoros y le ofrecieron regalos: oro, incienso y mirra. Luego, habiendo sido advertidos en sueños que no volverían a Herodes, regresaron a su país por otro camino».
Aunque el evangelio no precisa la cantidad de magos, se calculó un número estimado en base a la cantidad de regalos que recibió Jesús. Los nombres de los famosos jinetes de camellos, Melchor, Gaspar y Baltasar, aparecen por primera vez en el famoso mosaico del Siglo VI en la Basílica de San Apolinar el Nuevo en Rávena, Italia.
Según la creencia católica, el Día de Reyes coincide con el Día de la Epifanía, una de las celebraciones litúrgicas más antiguas. Esta significa «revelación y/o aparición» y hace referencia a que el niño Jesús se muestra al mundo por primera vez.
Así, quedó pactada la fecha del 6 de enero para esta festividad. También, este día marca el fin del período navideño en muchos países del mundo.
La palabra «mago» proviene del persama-gu-u-sha, que significa sacerdote, y hace referencia a una casta de sacerdotes persas o babilonios, quienes se dedicaron a estudiar las estrellas en su deseo de encontrar a Dios. Melchor,
Según las sagradas escrituras, Baltazar le regaló a Jesús la mirra, una sustancia que, por ese entonces, se utilizaba para embalsamar cadáveres y es el símbolo de la humanidad del Señor.
Melchor, por su parte, ofreció el oro, por la realeza de Cristo y, por último, Gaspar portaba el incienso, que expresaba la divinidad de Jesús.
tradiciones
En estas fechas cada país cuenta con su propia cultura y diferentes prácticas para celebrar esta festividad. En Argentina, las tradiciones más comunes para festejar el día de Reyes son:
-Comer rosca de reyes, una preparación de panadería que se encuentra cubierta de crema pastelera, frutas confitadas y perlas de azúcar.
-Dejar los zapatos junto al pesebre, el árbol de navidad, o en la puerta del hogar.
-Regalos para los camellos, simbolizados en un recipiente con agua y otro con pasto. Dormir temprano para que los Reyes lleguen con tiempo y puedan dejar sus regalos tranquilos.