Según un informe del Centro de Profesionales Farmacéuticos Argentinos (Ceprofar), los precios de los medicamentos en la Argentina acumularon un 320% de incremento entre enero y diciembre de 2023.
Según sostuvo esta entidad, la suba es de 100 puntos por encima de la inflación del 211% del año pasado y afecta especialmente a jubilados y pensionados que, a pesar de contar con Pami, u otras obras sociales, enfrentan dificultades para afrontar los constantes aumentos. Ante lo cual, la institución advirtió que esto se denota en la disminución del consumo de los principales remedios que cuantificó cercano al20%.
Para conocer la situación en la provincia, LA VOZ DEL CHACO consultó con María Inés Arévalo, presidenta del Colegio de Farmacéuticos, quien explicó que «el aumento de medicamentos fue de impacto para la población en general al igual que aumentos que se registraron en otros rubros».
Por su parte, Rubén Sajem, titular de Ceprofar, denunció que la Argentina es única en el mundo al permitir aumentos descontrolados en los precios de los medicamentos. La subida promedio entre noviembre y diciembre, tras el fin del congelamiento de precios, fue del 90%, superando el 100% en algunos casos.
Sajem destacó que la situación actual no se veía desde 2019 y alertó que 2 de cada 10 personas podrían no acceder a sus tratamientos debido a la escalada de precios. «Las ventas de fármacos ya han disminuido un 19%, y la perspectiva es que continúen bajando en enero», dijo.
En cuanto a esto, Arévalo aseguró que en la provincia «hay personas que a pesar de los aumentos continúan llevando las mismas marcas y hay personas que optan por marcas más económicas o medicamentos genéricos. Cada farmacia de acuerdo al barrio o la zona donde esté ubicada puede tener variaciones en marcas- precios».
Teniendo en cuenta que estos productos son una necesidad vital, la referente afirmó que «en general la gente continúa con sus tratamientos buscando alternativas de marcas más económicas y/o genéricos».
Al tiempo que recordó: «El farmacéutico es el único capacitado para poder realizar cambio de marca, por eso es importante que el paciente concurra a la farmacia». Asimismo aseguró que «en este momento como ha pasado en años anteriores no hay faltas ni escasez».
Atento al cambio de medicamentos de marca a genérico, Arévalo explicó: «Todos los medicamentos que se dispensan (venden) en farmacias son aprobados por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat). Sin esa aprobación no pueden salir al mercado», y aclaró: «Constantemente la Anmat realiza pruebas de controles sobre los medicamentos que se comercializan y nos informan si los mismos tienen algún inconveniente y deben retirarse del mercado, por ejemplo un lote en particular».
Asimismo reconoció: «Nuestra mayor preocupación con respecto al DNU es que sin esos informes y con medicamentos fuera de la farmacia se pierde un control necesario».
Y continuó describiendo: «Desde la comisión directiva del Colegio de Farmacéuticos del Chaco preocupa la venta de los medicamentos de venta libre, que si bien tienen este nombre ningún medicamento es inocuo, en lugares no habilitados como farmacias, donde no hay control de la procedencia de los mismos y de la fecha de vencimiento, condiciones de almacenamiento y no hay nadie responsable de aconsejar al paciente en caso de que sea necesario», cuestionó las medidas incluidas en el decreto de necesidad y urgencia del gobierno nacional, que entre los cientos de articulados, se encuentra esta posibilidad que generó el rechazo del sector.
Por lo que destacó: «Las farmacias tienen una habilitación municipal y una habilitación sanitaria», y cuestionó: «¿Cómo se gestionará esto en otros comercios que empiecen a vender medicamentos de venta libre y quién se hará cargo de control?».
Tras lo cual instó a comprar «medicamentos seguros solo en farmacias habilitadas».
Obras sociales
En cuanto a la cobertura de las obras sociales, ejemplificó: «Una obra social que cubra un medicamento 50%, el afiliado paga su porcentaje y el restante a cargo de la obra social la farmacia lo está recibiendo 30 a 60 días después de la presentación a las obras sociales. Ahí es donde impacta económicamente a las farmacias, ya que nosotros pagamos el medicamento de 7 a 14 días de recibido».
Con respecto a la cobertura del Insssep, Arévalo señaló: «Este mes hemos recibido el pago correspondiente a lo facturado en octubre de 2023. Las farmacias atienden con normalidad plan ambulatorio, pero algunos planes 100% queda a criterio de la farmacia dependiendo que no compliquen sus pagos a droguerías. Pero la mayoría de las farmacias está atendiendo todos los planes de Insssep».
Si bien Ceprofar expresó su preocupación por el posible impacto en la entrega gratuita de medicamentos a través de Pami, la obra social que brinda remedios sin costo a sus afiliados, Arévalo indicó: «Hay muchos afiliados que tienen planes con 100% de descuento en sus medicamentos así que los medicamentos están asegurados por los menos para la población que se encuentre dentro de este plan».
Por lo último, ante el avance del dengue y el fin de la cobertura de la vacuna, la titular del Colegio de Farmacéuticos indicó que la dosis de la inoculación tiene un valor $61.335.85 y necesita receta médica.