Del 18 al 24 próximos se realizará en Chascomús (Buenos Aires) la octava edición de la Fiesta Federal de las Orquestas Infantiles y Juveniles de la Argentina, organizada por la Fundación Soijar (Sistema de Orquestas Infantiles y Juveniles de la Argentina), que tendrá a más de 150 niños y jóvenes músicos de las 24 jurisdicciones del país como protagonistas y contará con la participación especial de Juan Carlos Baglietto y Lito Vitale, con Hilda Lizarazu como invitada. La provincia estará representada por la orquesta infantil comunitaria de Sáenz Peña Vientos de Cambio que volverá a participar de este encuentro.
«El festival combina una experiencia de formación para los niños y jóvenes participantes con una experiencia cultural para los turistas que deciden disfrutar de los conciertos que se brindan a lo largo de la semana. Los niños y jóvenes forman parte de una clínica intensiva con destacados referentes de la música y las orquestas argentinas y, además, ejecutan las partituras en cada uno de los conciertos.
Esta fiesta de la música tendrá conciertos durante toda la semana y dos momentos cúlmine: la apertura, el domingo 18, a las 19.30, con la participación especial de Juan Carlos Baglietto y Lito Vitale en el escenario junto a la Orquesta Filarmónica Federal e Hilda Lizarazu como invitada; y el cierre, el domingo 25, a las 19.30, dedicado a los 200 años de la novena sinfonía de Beethoven, con 150 niños y jóvenes que tendrán el honor de ejecutar, entre otras, las partituras del Himno a la Alegría.
Una ciudad que respira música
El festival llega a su edición 2024 con el respaldo de una larga experiencia que tuvo su primer capítulo en 2005, a partir del impulso que el maestro José Abreu, creador del afamado Sistema de Orquestas Infantiles y Juveniles de Venezuela.
A partir de entonces, el encuentro fue consolidando su presencia en el mapa musical y formativo de la Argentina, convirtiéndose en un acontecimiento de gran impacto federal que en 2023 convocó en Chascomús a alrededor de 500 músicos de 6 a 21 años provenientes de todas las provincias argentinas.
«Desde 2010 hemos logrado la representatividad federal. Para nosotros es muy importante cultivar los programas de la Fundación Soijar de manera sistémica y federal», resaltó Valeria Atela, presidenta de la fundación y directora del festival.
«Que cada acción que podamos hacer se irradie en todo el territorio, porque creemos profundamente en la música como un instrumento que transforma a las personas, pero también a las comunidades», completó la también fundadora y directora de la Orquesta-Escuela de Chascomús, primera experiencia nacional que aplicó la Metodología Orquesta-Escuela, creada por Atela.
Acerca de la Fundación SOIJAr
La Fundación Soijar es una organización sin fines de lucro que promueve en la Argentina el sistema de creación, desarrollo y fortalecimiento de orquestas infantiles y juveniles como herramientas de educación promoción sociocultural para los chicos del país. Brinda formación musical y pedagógica como instrumento de educación ciudadana a niñas, niños, adolescentes y jóvenes, docentes y agrupaciones musicales con un sistema de orquestas y coros como herramientas de inclusión que promueven el desarrollo humano y la integración comunitaria.
Acerca de
El Festival
El festival es el encuentro anual de niñas, niños, adolescentes, jóvenes y líderes de todo el país que eligen la música como instrumento de crecimiento personal y comunitario; durante una semana forman parte de una clínica intensiva de excelencia de la mano de prestigiosos maestros y referentes de las principales orquestas de nuestro país. El festival proyecta las capacidades individuales y colectivas de instrumentistas, referentes y agrupaciones musicales del país, con seminarios, clases, talleres, ensayos y conciertos. Además, brinda capacitación previa y posterior a distancia o presencial, clases magistrales de las academias argentinas de instrumentos, un simposio y seminario para los educadores, referentes y líderes del país y promueve concursos del Banco de Instrumentos Itinerante.
Vientos
de Cambio
Vientos de Cambio surge como una necesidad de brindar a los niños, adolescentes y adultos de la comunidad un espacio para el desarrollo integral a través de la música. Los objetivos del proyecto son la inclusión social, fortaleciendo el sentido de pertenencia, mejorando la asistencia a clases, estimulando la creatividad y el buen gusto a través de la enseñanza de la música.
Vientos de Cambio se puso en marcha en 2007, cuando Ricardo Velázquez llegó a la escuela rural por concurso en Colonia Rivadavia, cerca de Sáenz Peña, y se dio cuenta de que los chicos no iban al colegio. Por eso propuso revertirlo. Ricardo es trompetista y pensó en la música para entusiasmarlos a volver a estudiar.
En general los chicos que tocan en la orquesta Vientos de Cambio son hijos de trabajadores sin ingresos fijos, que trabajan como jornaleros o changarines, y que solían llegar a la escuela solo por la copa de leche», describe el maestro y director de la banda. «Ahora vienen por la música, y valoro el sentido de pertenencia que generó el proyecto, que desde que empezó agrandó un 250% la matrícula escolar», dice con orgullo el fundador y alma mater de esta movida que ya es gigante.
Vientos de Cambio empezó como una banda de vientos y luego se trasformó en una orquesta sinfónica. Los chicos no sólo aprenden música: también les enseñan valores, respeto, y a vivir en comunidad. Aprenden, aún sin tener nada que les sobre, de solidaridad. Y eso es educación: el único viento de cambio real y verdadero.
A través del Voluntariado Internacional de Música, se convocó a músicos europeos que no sólo donaron los instrumentos que necesitaba la orquesta, sino que además viajaron desde España, Francia y Alemania para enseñarles música a los chicos y desarrollar con ellos riquísimas actividades de intercambio. Y tanto creció, que ahora se están planteando la necesidad de replicar la experiencia en más escuelas, para acompañar la formación de nuevas orquestas sinfónicas en otros parajes rurales del Chaco y la región.
La programación de la octava edición del festival revalida la condición de Capital Nacional de las Orquestas Infantiles y Juveniles que Chascomús ostenta desde 2016, con una serie de actividades que se convierten en una excelente excusa para visitar la ciudad bonaerense ubicada a sólo una hora y media de viaje de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.