El senador y presidente de la UCR quedó en el centro de la polémica porque, junto con Pablo Blanco, fueron los únicos dos del partido que rechazaron el decreto impulsado por el presidente Javier Milei.
Durante una entrevista en Radio Con Vos, el senador, quien en diciembre pasado asumió como nuevo presidente de la UCR, afirmó ayer que la posición de su partido es de rechazo del DNU.
«Una cosa es la postura que tienen los radicales, puertas adentro y otra cosa es cuando van y votan. Puertas adentro, todos o casi todos dicen que es inconstitucional y que es una barbaridad. Y después votan distinto.
Algunos porque genuinamente habrán cambiado de posición, otros por conveniencia y otros por temor, porque este es un gobierno que amedrenta, que amenaza, que infunde temor», apuntó.
En ese sentido, dijo que «cada dirigente tiene que hacerse cargo», aunque advirtió que «si un dirigente tiene miedo por lo que después le digan en un tuit, en la calle o en un medio afín (al Gobierno), después cómo proponen que hay que cambiar la Argentina con los debates que realmente hay que dar».
En otro punto de la entrevista, el senador también acusó al Presidente de practicar «una simulación de acuerdo», ya que «el Presidente se enoja con los que piensan distinto e induce al ataque». Y le apuntó a los funcionarios del actual gobierno que formaron parte de la gestión de Alberto Fernández.
Otro paso en falso
Luego de pronunciar su discurso en rechazo a la iniciativa presidencial, el senador Lousteau sumó otra polémica: el constitucionalista que citó lo desmintió. El experto Ricardo Ramírez-Calvo, citado por Lousteau, aseguró que el senador radical hizo una lectura «intencionalmente equívoca» de su postura para adaptarla a lo que le servía: «Tienen la cara de acero inoxidable», se quejó.
Ramírez-Calvo utilizó su cuenta en la red social X para ir contra el dirigente. «Sería bueno que si el senador Lousteau me cita, me cite correctamente y no solamente lo que a él le sirve de lo que yo escribo. Una verdad a medias es una mentira», aseveró el abogado.
El constitucionalista consideró que Lousteau apeló a una referencia «intencionalmente equívoca» sobre su rol como asesor de Sturzenegger para así hacerle creer a la gente que, hasta quienes redactaron el DNU, lo entendían apartado de la Constitución.
Eduardo Vischi: «El rechazo no tiene que ser tomado como una derrota»
El legislador por Corrientes conversó con Eduardo Feinmann en «Alguien tiene que decirlo» tras el rechazo del DNU, y consideró que el resultado de la votación, contrario al pedido de la Presidencia, contiene un pedido de los parlamentarios dirigido al Ejecutivo para que cambie su estrategia legislativa y separe los temas en distintos proyectos para facilitar su tratamiento.
Además, consideró prudente modificar la ley que aborda el tratamiento de decretos de necesidad y urgencia, y afirmó que la decisión de Martín Lousteau de votar en disidencia de su propio bloque merece su respeto.
«Nosotros estuvimos discutiendo bastante dentro del bloque, entendíamos que es importante avanzar con darle un poco más de tiempo al Gobierno para que pueda lograr consenso», explicó el senador y remarcó: «Se está buscando a través del diálogo que se generó desde el inicio de marzo que se generó con los gobernadores, una citación, una convocatoria».
«Entendemos que más allá de que el DNU es una ley que ha generado el Ejecutivo, pero que verdaderamente toca muchas leyes, son trescientos artículos», reconoció y subrayó: «Nosotros entendemos que, con trabajo, con colaboración, podíamos generar propuestas alternativas a lo que nosotros pensábamos».
«Yo entiendo que la presidenta de la Cámara necesita cumplir con su obligación, tenía un pedido de casi 40 senadores, más de 40 senadores, que querían que convoque a una sesión especial, por eso ella dio esa respuesta de que no le quedaba alternativa», sostuvo en relación a la posición adoptada por la vicepresidenta Victoria Villarruel.
«El problema que tenemos es que hay una ley que tenemos que modificar, que es la ley que reglamenta los decretos de Necesidad y Urgencia, que no nos da la alternativa de abrir ni el contenido de los DNU, y entonces nos da la opción de, solamente, aprobar o rechazar», dijo.
Asimismo, remarcó: «El rechazo de ayer no tiene que ser tomado como una derrota, tiene que ser tomado como un mensaje en el cual, tal vez cambiando la forma, el contenido, y mandando los proyectos por separado, puede haber una discusión que mejore muchísimo el estado de situación que pueda ser en este camino».