El gobernador Leandro Zdero del Chaco, acompañado por el ministro de Infraestructura, Hugo Domínguez, encabezó en Buenos Aires gestiones clave ante el gobierno nacional para avanzar en infraestructura vital con impacto sobre 600 mil ciudadanos en toda la región.
El mandatario advirtió que actualmente el 60% de la población chaqueña carece de acceso continuo al agua potable, una situación que se ha vuelto insostenible y que requiere atención inmediata.
En ese sentido, expresó: «Queremos que el gobierno nacional tome dimensión de la importancia que implica finalizar las obras del segundo acueducto para 600 mil ciudadanos del Chaco, que no cuentan con agua corriente las 24 horas del día».
INFORME
Con un enfoque claro y decidido, el gobernador presentó presentado un detallado informe a funcionarios del Ministerio de Economía de la Nación, liderados por Luis Caputo, así como a representantes de la Secretaría de Obras Públicas, como Luis Enrique Giovine.
Este informe no solo resalta la urgencia de completar las obras, que han estado detenidas durante varios años, sino que también subraya los beneficios que la finalización del 18% restante de las obras traería a la población chaqueña.
La obtención del financiamiento necesario es esencial para que se reanuden los trabajos y se logre llevar agua potable a todos los rincones de la provincia.
En su informe, el gobernador destacó que los 600 mil beneficiarios de este proyecto pertenecen a 26 localidades del Chaco, lo que demuestra la amplitud del impacto que la finalización del acueducto tendría en la vida cotidiana de los ciudadanos.
Localidades como Tres Isletas, Villa Rural El Palmar, Presidencia Roque Sáenz Peña, Napenay y Avia Terai, entre otras, se verían directamente beneficiadas por la mejora en el acceso al agua potable. Esta iniciativa no solo aborda una necesidad básica, sino que también busca contribuir al desarrollo social y económico de las comunidades afectadas.
COMPROMISO ASUMIDO
El mandatario remarcó que su equipo está comprometido en continuar con las gestiones necesarias para asegurar que se comprenda la magnitud de este proyecto y la importancia que tiene para el bienestar de la población chaqueña.
Subrayó que la finalización del segundo acueducto no es solo una cuestión de infraestructura, sino que representa una oportunidad para mejorar la calidad de vida de cientos de miles de ciudadanos y fortalecer la capacidad del Chaco para hacer frente a sus desafíos hídricos actuales y futuros.
Cruce del río Negro
Por otro lado, en materia de conducción de agua del segundo acueducto, hacia Sáenz Peña se debe terminar el cruce del río Negro la altura de Makallé, con lo cual no se podrá dar mayor caudal al segundo acueducto para que llegue la cantidad de agua necesaria a la Termal.
En la zona de Sáenz Peña, Las Breñas y Gancedo también falta infraestructura eléctrica vinculada con el bombeo.
Además de obras anexas que tienen que ver con ese acueducto en la interconexión para llegar a San Bernardo, Villa Berthet, y para eso se tiene que repotenciar el acueducto existente entre Sáenz Peña y Villa Ángela.