El Indec dio a conocer este martes la inflación de abril: 8,8 por ciento, con lo cual acumuló en apenas cuatro meses un 65 por ciento. En la comparación interanual, el Indice de Precios al Consumidor (IPC) muestra un alza del 289,4 por ciento. Una familia de cuatro integrantes necesitó $828.158,19 para superar el umbral de pobreza en abril de 2024, 307,2 por ciento más que hace un año. Mientras tanto, el Gobierno celebra que la inflación sea de un dígito.
El dato refleja el resultado de la contracción económica producto de la devaluación, los ajustes, el congelamiento de los salarios y la caída del consumo que la administración de Javier Milei impulsó con la meta de frenar la escalada de precios que, en los hechos, se multiplicaron en shock y por varias veces en el inicio de su gestión.
El último dato dio cuenta de que la inflación en marzo había llegado al 11 por ciento, que en la sumatoria significó una suba de 287,9 por ciento interanual. Un récord no registrado en los últimos 40 años.
Desde que asumió el gobierno de La Libertad Avanza (LLA), la inflación fue la siguiente: 25,5 por ciento en diciembre de 2023; de 20,6 en enero (254 interanual); 13,2 en febrero (276,2 interanual) y 11 por ciento en marzo.
El informe de Indec
Según el informe del Indec, la división con mayor aumento de precios durante abril fue Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles con un 35,6 por ciento, seguida muy de lejos por Comunicación con un 14,2 por ciento. La de menor aumento fue Bebidas alcohólicas y tabaco con un 5,5 por ciento.
Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles aportó la mayor incidencia sobre la variación mensual en las regiones GBA, Cuyo y Patagonia; y Alimentos y bebidas no alcohólicas en el resto del país.
Durante abril de 2024, la región donde se registró la mayor suba mensual fue Gran Buenos Aires fue (9,2 por ciento), escoltada por el Noroeste (9,1 por ciento) .
Expectativas a la baja
La expectativa de que la tendencia continuaría a la baja fue tomada del principal parámetro de referencia que la administración nacional toma para hacer sus previsiones. El IPC porteño, que indicó que en la Capital Federal la inflación de abril fue del 9,8 por ciento.
La suba da cuenta, además, de un acumulado de 72,6 por ciento en el primer cuatrimestre del año y 292,5 por ciento interanual. Los gastos de vivienda, servicios públicos (agua, electricidad, gas) y otros combustibles fue la de mayor impacto.
Los números están en línea con el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central, que habló de 9 por ciento para abril a nivel nacional, 1,8 puntos menos que la misma medición del mes anterior.
Por su parte, el Índice de Inflación de los Trabajadores que elabora la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (Umet) dio cuenta de una inflación de 9,2 por ciento mensual.
La medición dio cuenta de la estabilidad del tipo de cambio, los menores costos financieros para las empresas y la caída del consumo.
En tanto, el dato demuestra que la suba de precios en los últimos cuatro meses fue del 71,2 por ciento y de un acumulado de 307,8 por ciento en términos interanuales.
La Umet ponderó el efecto de una menor tasa de interés real sobre los costos de las empresas y la caída del consumo, que desalienta futuras remarcaciones. De este modo, el Gobierno de Javier Milei puede mostrar que la inflación se desacelera, partiendo del cimbronazo de diciembre. En cuatro meses, los precios subieron 71,2 por ciento interanual y versus igual período del año anterior se cuadruplicaron.