El diputado provincial del Nuevo Espacio de Participación (Nepar), Juan José Bergia, entrevistado por LA VOZ DEL CHACO, saludó con satisfacción el paso de gobernador Ricardo Quintela y del senador Sergio Berni por la región.
Remarcó la importancia de mantener un diálogo constante y cercano con las bases e instó a las fuerzas políticas a enfrentar los desafíos actuales de la Argentina dejando de lado sus diferencias e indicó que el Nepar se enfrenta al reto de definir un modelo de provincia, calificando fundamental estimular la participación de los jóvenes.
-¿Cuál considera que ha sido el impacto político y social de la visita del gobernador Ricardo Quintela y del senador Sergio Berni en la provincia?
-Es saludable que dirigentes de relevancia nacional visiten nuestra provincia. Ellos tienen su propia percepción de la situación actual que estamos atravesando los argentinos, ambos tienen una perspectiva particular desde el Partido Justicialista. Su presencia refuerza la importancia de mantener un diálogo constante y cercano con las bases, lo cual es esencial para la cohesión política y social.
-¿Cómo interpreta el llamado a la unidad de Quintela y Berni en el contexto del panorama político actual?
-La unidad y la cohesión en los partidos mayoritarios son indispensables. En el contexto actual, donde nos enfrentamos a múltiples desafíos, es crucial que trabajemos para encontrar soluciones efectivas. El llamado a la unidad de Quintela y Berni refuerza la necesidad de dejar de lado las diferencias y enfocarse en objetivos comunes que beneficien a todos los argentinos.
-¿Qué desafíos enfrentan los partidos políticos para alcanzar una verdadera unidad y cohesión interna?
-En el Nepar (Nuevo Espacio de Participación), enfrentamos el desafío de definir el modelo de provincia que queremos. Debemos decidir si aspiramos a una provincia agro-industrial que genere empleos privados o si continuamos dependiendo de los puestos de trabajo generados por el Estado. Esta es una discusión fundamental sobre nuestro futuro. Además, es crucial que los jóvenes participen activamente, no solo en las redes sociales, sino involucrándose en la realidad de nuestra provincia. La disparidad entre vivir en el Gran Resistencia y en localidades como El Espinillo es evidente, con diferencias significativas en el acceso a la educación y al trabajo. Ejemplos como el del intendente de El Espinillo, Zenón Cuellar, que impulsó la construcción de hornos de carbón utilizando madera de descarte, muestran cómo podemos generar ingresos y oportunidades localmente.
La juventud, ante la disyuntiva del cambio
-¿Cuál es su opinión sobre el papel de la juventud en la renovación y modernización de la política?
-Tenemos una deuda con la juventud, ya que en estos 40 años de democracia no hemos sabido interpretar sus necesidades y aspiraciones. Sin embargo, ahora más que nunca, los jóvenes deben decidir si quieren ser el cambio o dejar la transformación en manos de otros. En la Argentina, se gradúan 52 abogados por día y sólo 190 físicos por año, lo que evidencia una disociación entre lo que necesita una economía moderna y el capital humano que se está generando. La juventud tiene el potencial y la responsabilidad de impulsar la renovación y modernización de la política.
Recuperar la empatía
-¿Qué estrategias considera que los partidos deberían implementar para revitalizar su vínculo con la ciudadanía y recuperar espacios perdidos?
-La estrategia clave es recuperar la empatía. Tenemos que reconocer y atender las necesidades de los ciudadanos en todos los aspectos, desde trámites simples hasta problemas más complejos. Es fundamental estar del lado de la gente, especialmente de aquellos que luchan diariamente por salir adelante. Los servidores públicos deben recordar que su sueldo es pagado por los ciudadanos, a quienes deben respeto, atención y dedicación. Sólo estando en contacto con la realidad de la gente podremos recuperar la confianza y los espacios perdidos.
«Las provincias también existimos»
-¿Cuál es su opinión acerca del modelo de país que propone el presidente Javier Milei?
-Creo que Milei inventó varios «eslóganes» que captaron la atención de los argentinos. La gente estaba cansada de la corrupción y de la falta de respuestas, y eso explica en parte cómo ganó. Sin embargo, su visión de un país que termina en la General Paz es lamentable. Las provincias también existimos y nuestras necesidades y demandas deben formar parte de la agenda del gobierno nacional. La política no puede ser un juego de niños caprichosos. Un presidente que decide ignorar al Congreso no puede ser saludable para el pueblo.
-¿Cómo cree que los partidos políticos deberían adaptarse a los cambios?
-Debemos estar siempre atentos y en acción al lado de la gente. Ponernos en el lugar del otro y mostrar que nos preocupamos y ocupamos de resolver los problemas que enfrentan. La ciudadanía necesita ver a sus gobernantes comprometidos y activos en la búsqueda de soluciones. Solo así podremos adaptarnos a los cambios y responder efectivamente a las demandas sociales y políticas actuales.
Trabajar acuerdos, ideas y consensos
El diputado provincial, por otra parte, recordó el discurso que pronunció en la Legislatura provincial a fines de mayo de 2021, en el que instó el cuerpo parlamentario a fortalcer la democracia y la confianza pública en las instituciones.
En el mismo, el legislador advirtió que la sociedad enfrenta una gran crisis de confianza, remarcando: «Desconfiamos de las autoridades, de la clase política, de las instituciones, de los proyectos económicos, de los medios de comunicación, de las empresas, de la justicia, del sistema de salud, de los sindicatos y de las estadísticas. En una palabra, desconfiamos de todo».
Entonces, Bergia subrayaba que esta desconfianza se agrava debido a la creciente polarización en la sociedad que atraviesa todas las esferas de la vida cotidiana.
Y enfatizó que esta división es especialmente evidente en la clase política, donde los enfrentamientos y las recriminaciones públicas aumentan la separación en bandos. «A los problemas económicos y sociales se les suma esta polarización, obstaculizando hasta los diálogos más básicos», afirmó. Para superar estos desafíos, el diputado abogó por el uso del cuestionamiento y la crítica constructiva como herramientas necesarias para crear comunidades más justas e igualitarias, e hizo hincapié en la necesidad de evitar ataques personales y críticas vacías sin fundamentos.
El diputado concluía su mensaje enfatizando la necesidad de trabajar en acuerdos, ideas y consensos, y de dialogar con quienes tienen distintas visiones sin descalificaciones.