La investigación sobre la desaparición de Loan Danilo Peña, el niño de 5 años, podría dar un giro inesperado en las próximas horas. La jueza Cristina Pozzer Penzo levantó el secreto de sumario y reveló que recibió un sobre con información crucial, incluyendo tres audios que la justicia no tenía en su poder hasta ahora.
El contenido del sobre, que involucra a la exfuncionaria María Pérez Caillava y a Carlos Pérez, llevó a la magistrada a ordenar un nuevo allanamiento. Este nuevo desarrollo en la investigación generó expectativas sobre posibles avances significativos en el esclarecimiento del caso.
Según fuentes judiciales que consultó el medio Ámbito, la información contenida en la carpeta apuntaba a una ubicación específica, lo que motivó el allanamiento en busca de pruebas que podrían estar relacionadas con el matrimonio Pérez-Caillava.
Las autoridades creen que en el domicilio allanado podrían encontrarse elementos ocultos como teléfonos no entregados, dólares de procedencia desconocida y drogas.
En paralelo, la investigación también avanzó en el análisis del celular de Catalina, la abuela de Loan. Los peritos del Departamento Antisecuestros de la Policía Federal Argentina encontraron 166 llamadas en el dispositivo, de las cuales 34 habían sido eliminadas.
Este hallazgo fue clave para los investigadores, ya que reveló posibles intentos de ocultar comunicaciones importantes. El teléfono, un Samsung modelo GSM GT E1205Q, resultó ser un dispositivo antiguo y con pocas aplicaciones, lo que facilitó el trabajo de los peritos.
Entre los contactos agendados en el celular de Catalina, se encontraron los nombres de María Victoria Caillava, exfuncionaria municipal, y Antonio Benítez, esposo de Laudelina Peña, todos ellos detenidos por la presunta sustracción y ocultamiento de Loan. También se halló el número de Diego «Huevo» Peña, esposo de Camila Núñez.
Uno de los detalles que llamó la atención de los investigadores es la actividad del teléfono de Catalina antes de la desaparición de Loan. Según el informe, Catalina realizó 13 llamadas entre las 11:56 y las 13:30 del día de la desaparición.
Este dato resulta significativo ya que, según el testimonio de Macarena, hija de Laudelina y Benítez, ella, su hermana, Loan y su padre José llegaron a la casa a las 10:41 de la mañana, donde su madre ya estaba cocinando.
El informe también indicó que Catalina se comunicó con personas que ya estaban en su casa, lo que añade una capa de complejidad a la investigación. Además, una llamada recibida desde Buenos Aires a las 16:12, que duró 9 minutos y 25 segundos, se llevó todo el interés de los investigadores por su posible relevancia en el caso.
Cristina Pozzer Penzo ordenó una serie de medidas que podrían arrojar luz sobre el misterioso caso que ya lleva casi 50 días sin resolverse. Entre las decisiones más destacadas, la magistrada solicitó investigar los movimientos patrimoniales de los detenidos y de la familia de la víctima, además de convocar nuevamente a Catalina, la abuela del niño, para que preste declaración.
En un escrito de seis fojas al que tuvo acceso Infobae, la jueza detalló las acciones a seguir. A pesar de que la teoría del accidente introducida falsamente por Laudelina Peña fue descartada por quienes están al tanto del caso, se ordenó un nuevo examen de la abolladura en la camioneta Ford Ranger de los acusados Carlos Pérez y María Victoria Caillava. Cabe mencionar que el material genético extraído de la camioneta no pertenecía a Loan.
La citación a Catalina Peña, quien ya había declarado anteriormente, es uno de los puntos clave de las nuevas medidas. La jueza escribió: «Citar a comparecer como testigo, en su domicilio en razón de la edad, a Catalina Peña para el viernes dos de agosto de 2024 a partir de las 11.00 horas, con fecha supletoria para el lunes cinco de agosto de 2024».
Esta decisión se tomó luego de que se revelara que el celular de Catalina contenía 34 llamadas borradas y una actividad inusual después de la desaparición de Loan.
Respecto al relevamiento patrimonial de los detenidos, Pozzer Penzo ordenó el levantamiento del secreto fiscal, bancario y bursátil de todos los imputados. También se solicitó un análisis exhaustivo de los bienes de los hermanos de Loan, su madre María Luisa, su padre José, sus primas Macarena y Camila (hijas de Laudelina Peña), la abuela Catalina y el hijo de María Victoria Caillava.
El Registro Nacional de la Propiedad Automotor deberá informar si los mencionados poseen automotores, motovehículos, titularidad, cédulas asociadas, historial y transferencias.
Similarmente, el Registro de la Propiedad informará sobre propiedades, propiedades rurales, operaciones de compra y venta de las personas involucradas, incluyendo orientación, fecha de inscripción, número de folios y libro matriz. Con estas acciones, buscarán identificar activos concretos que podrían ser producto o provecho del delito.
La Justicia también insiste en descartar pruebas relacionadas con la versión del accidente, a pesar de la retractación de Laudelina Peña. La Policía Federal Argentina (PFA) deberá verificar si la camioneta Ford Ranger de los acusados cuenta con un dispositivo electrónico o digital que registre algún golpe en alguno de sus extremos.
Estas medidas se toman luego de que la jueza levantara el secreto de sumario que pesaba sobre el expediente. En los próximos nueve días, Pozzer Penzo deberá definir la situación procesal de los siete acusados que permanecen detenidos. Las opciones incluyen procesarlos y mantenerlos bajo prisión preventiva, dictarles falta de mérito o sobreseerlos.