Médicos y profesionales residentes del sistema público de salud se manifestaron este viernes, en Casa de Gobierno, ante la falta de pago de sueldos que debían haber sido depositados el martes.
“Somos entre 700 y 800 en toda la provincia; este es un problema que no afecta solamente al Perrando sino a todos los hospitales de la provincia”, aseguró José Torrentes, delegado del sector quien remarcó que habitualmente cobran sus salarios con el resto de la administración pública y, hasta el momento, no percibieron los haberes de septiembre.
“Tuvimos una reunión el miércoles y nos dijeron que fue un error pero tampoco nos dieron una fecha cierta en la que nos pagarán”, resaltó Torrentes que, como medida de protesta, decidieron hacer guardias mínimas. «De no haber respuestas, vamos a profundizar las acciones», advirtió.
En paralelo, planteó otro problema respecto de los salarios: este mes cobrarán menos que en agosto.
“Nosotros hacemos guardias de 36 horas y de base que estamos 12 horas por día ahí adentro del hospital; veníamos cobrando 940 mil pesos y nos avisaron que ahora vamos a cobrar 800 mil pesos, o sea menos de lo que se cobró el mes pasado”, explicó.
Torrentes adelantó que este viernes sostendrán una reunión con autoridades del Ministerio de Salud y que esperan una respuesta favorable a su reclamo. “Queremos que nos firmen un papel o un documento que nos confirme cuando vamos a estar cobrando”, señaló.
¿Por qué están en paro los residentes de salud pública?
La situación que enfrentan estos médicos no es menor. Han señalado incumplimientos en el pago de salarios, falta de insumos esenciales para su labor, y deficiencias en la infraestructura donde desempeñan sus tareas. Estas preocupaciones no solo afectan su bienestar, sino también la calidad de atención que pueden ofrecer a los pacientes.
El hecho de que el colectivo haya decidido marchar desde el Hospital Perrando hacia la Casa de Gobierno, pone en evidencia la urgencia y relevancia de sus demandas. La atención de la salud no debe verse comprometida por falencias administrativas o de gestión.
Los puntos críticos del reclamo
Irregularidades en los pagos a residentes, especialmente a aquellos que recién ingresaron el año pasado.
Desacuerdos en los montos reflejados en las becas, lo cual pone en desventaja a muchos residentes frente a sus colegas.
Falta de entrega regular de viandas y la disminución de su calidad en lugares como el Hospital de Castelli.
Condiciones laborales no óptimas: falta de insumos, deterioro en las instalaciones y hacinamiento en las residencias.
Los residentes hacen un llamado urgente a establecer un régimen de insalubridad que mejore sus condiciones de trabajo y de vida.
La importancia de atender estas demandas
Para que un sistema de salud funcione de manera óptima, es esencial garantizar condiciones adecuadas para quienes trabajan en él. Las residencias son espacios de formación y trabajo simultáneo. Optimizar las condiciones de estos espacios no solo beneficiará a los residentes, sino también a los pacientes que son atendidos por ellos.
Escuchar y actuar frente a estas demandas es un paso hacia la mejora continua del sistema de salud. Las residencias son mejorables, y es a través de la voz activa y comprometida de sus residentes que se pueden identificar y atender las áreas de oportunidad.
Conclusión
La salud pública es un pilar fundamental para el bienestar de la sociedad. Asegurarnos de que quienes están en formación y atención directa con los pacientes tengan lo necesario para desempeñarse adecuadamente es esencial. Las demandas del Colectivo de Residentes de Salud Pública nos recuerdan que siempre hay espacio para mejorar y optimizar. Es responsabilidad de todos, desde el Gobierno hasta las instituciones y la sociedad civil, trabajar juntos en pos de un sistema de salud más robusto y eficiente.